Fiel a su costumbre, el entrenador de Boca, Claudio Borghi, habló ayer tras la práctica del equipo en Casa Amarilla. Sorprendido por la gran cantidad de periodistas que se dieron cita en la primera práctica de la semana luego de sus polémicas declaraciones y su fallido intento de renuncia, Borghi se quejó: “Veo que hoy están hasta los de las noticias policiales, a lo mejor cometí algún delito”. Eso sí, el DT aclaró varios temas: admitió la “mala campaña” de Boca, dijo que ganar el superclásico no sirve para “salvar el año” y que sigue en el cargo para intentar “fortalecer” al equipo.

“Yo no hablo un castellano muy fluido. Una cosa es renunciar y otra es poner el cargo a disposición. Yo no renuncié, terminado el partido hablé con el presidente y le dije que nos poníamos a disposición para seguir o no seguir”, manifestó ayer el entrenador boquense. Luego, a modo de protesta por las reacciones que provocan sus declaraciones en el medio, se quejó: “Ser honesto para mí es una virtud, no un defecto, y me sorprende todo lo que se habla sobre mí”.

El entrenador descartó que una victoria sobre River en el superclásico de la fecha 14ª le sirva al equipo para salvar el año y manifestó que se le hace difícil pensar en el campeonato y que el objetivo ahora es “fortalecer” el equipo. “¿Si hacemos una mala campaña y le ganamos a River es suficiente? Para mí, no. Es un clásico importante, pero no alcanza para salvar el año, un partido no cambia nada”, admitió Borghi, y agregó: “La campaña es muy mala. Pero aun así sentir el apoyo es importante. Hay que ver cómo mantenemos la ilusión de la gente y la nuestra, sólo hay un puntero y tenemos que perseguirlo”.

Borghi, que no podrá dirigir al equipo frente a Tigre porque fue expulsado ante Lanús por demorar un minuto a su equipo en el entretiempo del encuentro ante los granates, apuntó sus cañones al fortalecimiento del equipo. “Hay una diferencia muy grande y hemos perdido demasiados partidos. Antes de pensar en un campeonato pensaría en un equilibrio, fortalecernos nosotros y después ver qué hacer”, manifestó.

Luego de la caída ante Lanús en la Bombonera, con un penal en contra en el último minuto de juego, Borghi deslizó que renunciaba, pero luego de charlar con los futbolistas y los dirigentes frenó su impulso. En la noche del lunes, el DT cenó con un grupo de directivos de Boca y les aseguró que seguirá. Por su parte, los dirigentes le pidieron que deje de sembrar dudas sobre su continuidad al frente del equipo. Incluso, el entrenador aseguró ayer que soportaría una caída ante Tigre el próximo domingo, y manifestó: “Vamos a tratar de mantener el proyecto... hasta diciembre, junio, no sé”.

Con respecto a su esquema táctico, Borghi volvió a defender su idea de jugar con línea de tres en el fondo y argumentó que los partidos no se perdieron por el esquema.