El entrenador de Boca, Rodolfo Arruabarrena, probó ayer el equipo para visitar a River, sin variantes respecto del último encuentro ante Quilmes, en una práctica de fútbol que se realizó a puertas cerradas en la Bombonera y con la cancha mojada para simular las condiciones del Monumental. Durante la práctica, que finalizó sin goles, tres jugadores resultaron golpeados: Andrés Chávez (tobillo derecho), Fernando Gago (tobillo derecho) y Jonathan Calleri (cadera), pero en todos los casos se recuperaron y terminaron bien la práctica.