River no tuvo inconvenientes para comenzar la defensa del título de la mejor manera en la Copa Libertadores. El conjunto de Marcelo Gallardo derrotó al débil Trujillanos de Venezuela, en el debut de ambos equipos en el grupo 1. El actual campeón encabeza las posiciones con tres puntos, junto a The Strongest de Bolivia, y el que tampoco suma unidades es San Pablo de Brasil. La diferencia entre ambos se notó desde el principio, y los locales no tuvieron oportunidad de poder emparejar la situación.

El ex Argentinos Leonardo Pisculichi fue el más destacado, sobre todo porque se dio cuenta dónde estaba la clave del encuentro. Los remates de media distancia fueron el camino por el que Pisculichi fue perforando al arquero Díaz. “Creo que probar de media distancia era importante por la inseguridad que mostró el arquero. Por suerte, pudimos ganar con claridad, que en el debut siempre es importante”, dijo Pisculichi luego del partido. Por su parte, el uruguayo Iván Alonso, autor de dos goles anoche, indicó: “Siempre es importante empezar con un triunfo. Para mí es muy lindo convertir dos goles en una Copa Libertadores. A mi edad, estoy viviendo una realidad muy linda”. Y fue más allá: “Tener a Gallardo como entrenador, de gran prestigio internacional, es un honor para mí. Ahora le tengo que demostrar en la cancha esa confianza que él deposita en mí”.

El arquero Marcelo Barovero también se mostró conforme con el rendimiento, sobre todo porque River venía de tres partidos sin poder ganar en el torneo local. “Nos sirve mucho este comienzo, porque nos libera un poco de la situación en la que estábamos, que no podíamos vencer. El otro día, el empate de Central en el final fue como una derrota para nosotros. Va a ser una zona difícil, porque San Pablo perdió como local y va a salir a buscar esos tres puntos de visitante. Pero para nosotros es muy bueno arrancar así.”

El primer tiempo mostró poco para destacar, debido a que los dos se preocuparon más por la marca y poco por el despliegue en ofensiva. Encima, el estado del campo no era el mejor, y se hacía complicado jugar la pelota por abajo, algo que River intenta exhibir en cada presentación. Pero todo cambió en la segunda mitad, a partir de la pegada de Pisculichi, quien antes de convertir el primer gol, a los diez minutos, había tenido una oportunidad con un remate desde lejos. Al arquero se le hacía retener la pelota cada vez que probaban al arco, y el segundo tanto llegó por un toque de González luego de que Díaz no pudiera controlarla.

El uruguayo Iván Alonso, de 36 años, se encargó de hacer el resto en la noche Venezolana. Con dos apariciones suyas, el equipo concretó la goleada que al término de la primera etapa parecía impensada. Sin haber ofrecido un fútbol superlativo, a River le alcanzó para dar el primer paso de manera positiva, y comenzar a defender el título obtenido el año pasado ante Tigres de México.