DEPORTES › BOCA Y RIVER JUEGAN EN EL ORANGE BOWL DE MIAMI
Raro Superclásico importado
Los más grandes de este fútbol achicado están haciendo unos dólares y pretemporada en EE.UU. El fútbol local vuelve importado.
Después de la frustración argentina en Corea y Japón, el fútbol argentino comienza a despertarse lentamente con el inicio de las pretemporadas. Y en ese marco, a menos de una semana de la eliminación del equipo de Marcelo Bielsa en el Mundial 2002, Boca y River comenzarán su preparación con el primer Superclásico de este segundo semestre. El encuentro se jugará hoy en el estadio Orange Bowl de Miami, Estados Unidos. Sin muchas caras nuevas en ambos planteles, la mayor novedad será el debut del ingeniero Manuel Pellegrini como nuevo director técnico de River. Por el lado de Boca, el ex Talleres César La Paglia regresó al club para cubrir la ausencia de Juan Román Riquelme, que podría pasar al Atlético de Madrid español en las próximas horas.
Para este choque, Pellegrini tiene sólo dos dudas para definir el equipo titular: Marcelo Escudero o Leonardo Astrada en el mediocampo, y Maximiliano López o Alejandro Domínguez en el ataque. Durante las últimas prácticas de fútbol que llevó a cabo el plantel en el complejo del hotel Hilton Fort Lauderdale, el técnico eligió a Escudero y a López como titulares, pero no hay que descartar a Astrada (busca su puesta a punto) y a Domínguez (se recupera de una operación en el tobillo derecho). Entre los ausentes para este nuevo ciclo se encuentran Esnaider (quedó libre), Ortega (vendido al Fenerbahce) y Husain (su préstamo vencerá a fin de mes).
Por su parte, Boca arranca esta segunda parte del año con un plantel reducido por las ventas y sin incorporaciones. Ausentes Serna, Traverso y Walter Gaitán, los tres transferidos al fútbol mexicano, y con la ausencia de Riquelme, que está tramitando su pase al Atlético de Madrid, el entrenador Oscar Tabárez tendrá que rearmar la estructura. Para el partido de esta noche tampoco podrá ser de la partida, aunque viajó y se entrenó con el equipo, el defensor Diego Crosa, ya que los dirigentes siguen negociando su pase con los directivos del Betis español.
En tanto, para tratar de disimular la ausencia del talentoso Riquelme, el uruguayo utilizaría a la dupla Carlos Tévez-Cristian Giménez para generar opciones para la delantera que ocuparán Guillermo Barros Schelotto y Héctor Bracamonte. El fútbol argentino quiere despertar después de la gran pesadilla oriental.