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Corea logró el objetivo. Luego de un trabajo a largo plazo en el que la Federación Coreana de Fútbol le dio todas las facultades al entrenador holandés Guus Hiddink, el equipo cumplió con la meta propuesta. Con el triunfo 1-0 ante Portugal, Corea se adjudicó su grupo, se metió en octavos de final por primera vez en la historia y de paso mandó a casa a otro candidato. La derrota portuguesa le permitió avanzar a Estados Unidos, que ayer cayó 3-1 ante Polonia, pero igual avanzó.
Corea, que había participado en los mundiales de 1954, 1986, 1990, 1994 y 1998 sin poder superar la primera ronda, se impuso con un golazo de Park Ji Sung a los 25 minutos del segundo tiempo y se enfrentará el martes próximo a Italia, en uno de los cruces de octavos de final. El partido generó una gran polémica por el arbitraje del argentino Angel Sánchez, que expulsó a dos jugadores portugueses. Tanto el técnico Antonio Oliveira como la máxima figura del equipo, Luis Figo, se quejaron de la actuación de Sánchez, que echó en el primer tiempo a Joao Pinto por una violenta infracción y en la segunda a parte a Beto por doble amarilla.
Pero más allá de las discusiones, Corea aprovechó la ocasión y se aseguró el pasaje gracias a un golazo de Ji Sung Park: el coreano bajó un centro con el pecho en el área portuguesa, le tiró un sombrero con la derecha a Sergio Conceiçao y en el mismo movimiento batió a Vitor Baia con un zurdazo violento. Ese resultado sacó de carrera a Portugal, que hasta ese momento estaba logrando avanzar por la derrota de Estados Unidos ante Portugal. De esa manera se concretó una nueva decepción en el torneo, ya que al igual que Argentina y Francia, Portugal aparecía en los papeles como una selección con posibilidades de llegar lejos. Para los coreanos el objetivo ya está cumplido, aunque ahora quieren seguir avanzando, por más que el rival en octavos sea Italia.
El triunfo coreano también se festejó en Estados Unidos. Es que a pesar de perder 3-1 ante Polonia, el conjunto de Bruce Arena se metió en los octavos de final, donde se medirá con México en el gran clásico norteamericano. Los polacos arrancaron con todo y a los cinco minutos ganaban 2-0 con tantos de Olisadebe y Kryszalowicz. Luego aumentaron porintermedio de Zewlakow y tuvieron una chance más con un penal que Friedel le detuvo a Zurawski. Sobre el final, Donovan descontó para Estados Unidos, aunque en ese momento lo que más importaba era los que ocurría con Portugal.