La política también jugará hoy un papel en el Mundial: los tres encuentros, en Leipzig, Colonia y Nuremberg, tienen no solamente un significado deportivo. En Leipzig, se juega un partido de tres países, entre Serbia y Montenegro, que ya son dos naciones distintas pero tienen un solo equipo, en el que hay amplia mayoría de serbios y un solo montenegrino, el arquero Jevric. En Nuremberg, Irán se presenta ante México rodeado de una especial expectativa, luego de las declaraciones del presidente Mahmoud Ahmadinejad negando el Holocausto y el apoyo de los neonazis alemanes. “Intentamos separar política de deporte. Nos concentramos plenamente en nuestro trabajo”, resaltó el entrenador Mehdi Mahdavikia. En Colonia se medirá Portugal con su antigua colonia Angola, independizada en 1974. “El choque es un partido para la historia. Queremos mostrar a todo el mundo que somos amigos”, resaltó el entrenador de Portugal, Luiz Felipe Scolari, que es brasileño... “Toda Angola espera un triunfo”, dijo el técnico asistente Alvaro de Almeida Mabi.