Los conflictivos avales que tantas denuncias promovieron cuando Mauricio Macri los instituyó en el club siguen vigentes como requisito para presentar las candidaturas. Cada lista debe cubrir con ellos (mediante escrituras de propiedades, por ejemplo) el 5 por ciento del Patrimonio neto boquense aprobado por asamblea. Ese porcentaje asciende hoy a unos 9 millones de pesos. La agrupación de Digón, Nuevo Boca, comprobó en una pesquisa que realizó hasta dónde llegó Angelici con sus garantías.

El candidato que apoya el jefe de Gobierno porteño es un hombre acaudalado, empresario del juego, propietario de varias salas de Bingo en Buenos Aires, Córdoba y Mendoza e integrante del directorio de varias sociedades a las que dice haber renunciado en marzo pasado para postularse en Boca. Con ese pedigree habría logrado juntar avales por 32 millones de pesos, suma con la que cubrió a todos los candidatos de su lista. No le hacía falta tanto, pero el Tano, como lo apodan, presentó ese generoso respaldo. En la lista de Ameal no deberían tener problemas para conseguir un monto equivalente al 5 por ciento del patrimonio neto. Cuando Macri era presidente modificó el estatuto boquense e impuso los avales como condición para ser dirigente. En aquel momento el porcentaje llegaba hasta el 10 por ciento, una cifra que sus adversarios denunciaron como proscriptiva y discriminatoria. Eran unos 2 millones de pesos.