Los créditos hipotecarios para la construcción de vivienda nueva, que acaba de lanzar el Banco Hipotecario con respaldo de fondos de la Anses, contarán con un año de gracia. Es decir, los beneficiarios no deberán pagar la cuota en los primeros doce meses de otorgado, en el transcurso de los cuales irán recibiendo el desembolso del crédito en cuatro tramos: del 20, el 30, el 25 y otro del 25 por ciento, respectivamente. Así lo hicieron saber ayer voceros de la institución, al informar además que más de 400 mil personas realizaron consultas hasta el viernes para acceder a alguna de las distintas variantes crediticias: construcción de vivienda nueva, ampliación, terminación, compra de unidad nueva o usada.

Las expectativas que había depositado el gobierno nacional en el lanzamiento del programa de créditos para la vivienda (y relanzamiento del Banco Hipotecario, en su función social histórica de dar acceso a la vivienda) están recogiendo rápida respuesta. El aluvión de consultas es un reflejo, a la vez, del amplísimo déficit habitacional que padece la población, pero a la vez de la inutilidad de la gestión de la banca privada, en el marco del actual sistema financiero, para dar solución incluso a aquellos que cuentan con un nivel de ingreso suficiente para afrontar el costo de una cuota mensual.

Según la fuente oficial, la mayor cantidad de consultas estuvo vinculada a la intención de compra de viviendas usadas, alcanzando una proporción del 38 por ciento del total. Por detrás, se ubicaron aquellos que pidieron datos para adquirir inmuebles nuevos, que representaron el 28 por ciento. El 23 por ciento solicitó información para créditos para construir inmuebles, mientras que un 12 por ciento requirió datos para financiar la ampliación o terminación de viviendas.

Diego Bossio, director del Banco Hipotecario por el Estado, precisó que hasta el viernes, inclusive, “había 300 mil visitas en Internet para averiguar por los créditos, 29 mil visitas físicas en todas las sucursales del banco en el país y 100 mil consultas telefónicas”.

Al comentar estos datos, Bossio opinó que “la demanda y la expectativa que generó esta iniciativa son realmente increíbles, superior a lo esperado”. Puntualizó que en los dos primeros días de operatoria del programa de créditos para la vivienda “ya se hicieron 1415 solicitudes por 190 millones de pesos”, lo que dio lugar a que ya se pusieran en marcha algunos expedientes.

“Esperamos dar respuesta a la mayor cantidad de gente posible. La Anses ya depositó parte de los recursos para poder generar los créditos”, explicó el funcionario, quien subrayó que “hay una serie de trámites que no dependen del Banco, pero el Banco es un especialista en esto, tiene todo bien estructurado, por lo cual pronto se entregarán los primeros créditos”.

El gerente de Relaciones Institucionales del Banco Hipotecario, Javier Varani, coincidió, por su parte, en que “las consultas superan las expectativas, que ya eran altas” y agregó que, además de las casi 300 mil visitas en la web de interesados en los créditos hipotecarios, sucedió otro tanto en el teléfono 0810-9994476, donde “se mantuvieron los 600 llamados por día”. Incluso, agregó, debieron hacerse “modificaciones de atención para adecuarnos a la demanda”.

Varani dijo que una de las más solicitadas en la web es la línea de ampliación o terminación de vivienda, la que por otra parte es la más promovida por las autoridades, interesadas en la generación de empleo. “La política de la Anses es promover las líneas constructivas que generan empleo, por eso se las promueve con una tasa de interés más baja”, detalló en referencia a estos préstamos que permiten una ampliación de hasta 40 metros cuadrados y que contemplan una superficie total finalizada del inmueble que no debe sobrepasar los 120 metros cuadrados.

Las líneas de crédito para la construcción son las que otorgan mayor beneficio, por las condiciones y el costo de financiación. La tasa de interés directa es del 10 por ciento anual, en pesos y a cuota fija, que puede elevarse hasta el 13 por ciento, contabilizando el costo financiero total, incluida la comisión de ingreso. En el caso de construcción de vivienda nueva (desde cero), el plazo de financiación es de hasta 20 años y el monto máximo a requerir es de 300 mil pesos. Tal cual se especificó ayer, el beneficiario contará con un primer año de gracia, es decir, no deberá hacer desembolsos durante los primeros doce meses. En el caso de los créditos para ampliación o terminación, podrán obtenerse con un plazo máximo de 15 años (180 cuotas) y podrá financiar hasta el 70 por ciento de la obra.

En los casos de construcción nueva, los préstamos se otorgan en cuatro etapas. Primero, hay un anticipo por el 20 por ciento; en el segundo tramo, el beneficiario recibe el 30 por ciento; luego hay dos entregas más del 25 por ciento cada una. Previamente a la entrega de cada etapa, instructores y personal especializado del banco supervisarán la marcha de la obra para constatar que se realice de acuerdo a lo establecido. Los aspirantes al crédito deberán disponer, además, de toda la información y documentación personal y la referida a sus ingresos, los títulos de propiedad sobre el terreno, en caso de construcción nueva, o del inmueble cuando se trate de una ampliación o terminación.

La superficie máxima a construir, en caso de vivienda nueva, se estableció en 120 metros cuadrados. En el caso de ampliación, se dispuso el límite en 40 metros cuadrados.

Fuentes del Banco Hipotecario indicaron, además, que ingresaron a modo de solicitudes 1200 carpetas de usuarios ya precalificados, es decir, personas que presentaron la documentación requerida y cuentan con los requisitos para solicitar los préstamos. De ese total, según la información que hizo llegar al banco la consultora de riesgo crediticio Veraz y Gnosis, el 75 por ciento cumplía las condiciones para obtener el préstamo.