Son once las provincias que ya reestructuraron su deuda con la Nación. Ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner rubricó la adhesión de Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Rioja, Río Negro, Salta, San Juan y Tierra del Fuego al plan federal de desendeudamiento. Esto se suma al ingreso de Buenos Aires, Chaco y Tucumán, que canjearon en junio último más de 35 mil millones de pesos adeudados con la Nación y a las que se les cancelaron pasivos por 5167 millones. “Teníamos la necesidad de refinanciar los pasivos provinciales y hoy once refinancian casi el 83 por ciento del total de sus deudas”, dijo la mandataria. Por administración de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) el Gobierno acumuló por el equivalente a unos 2000 millones de dólares que se descontará a las provincias.

El Gobierno inició en junio último el Programa Federal de Desendeudamiento. El objetivo fue reducir el nivel de deuda que las provincias tienen con el Estado nacional en concepto de asistencia financiera, rescate de cuasimonedas y canjes previos. Para ello, Economía instruyó al Banco Nación para que instrumente el plan de pagos que rige a partir de la firma de cada uno de los convenios bilaterales entre las provincias que se sumen y el Ejecutivo. El monto total a reestructurar era de 65.500 millones de pesos sobre 73.912 millones.

Los primeros en adherirse al programa (Buenos Aires, Chaco y Tucumán) canjearon más de la mitad de ese monto. De hecho, Buenos Aires, la provincia más endeudada, logró refinanciar 27.807 millones de pesos, un 63 por ciento de los pasivos totales bonaerenses.

Ayer, cuando se vencía el plazo de 45 días hábiles dispuesto para adherir al plan, se sumaron ocho provincias. De esta manera, ingresó el 83 por ciento de la deuda de las provincias con el Estado nacional. “Esto significa un desahogo importante para estas jurisdicciones”, señaló la jefa de Estado.

El programa contempla la refinanciación a veinte años con una tasa fija del 6 por ciento, la eliminación del ajuste por CER y una quita sobre la deuda del 40 por ciento, con 18 meses de gracia que vencen en diciembre del año próximo. Por su parte, el ministro de Economía, Amado Boudou, quien también rubricó los convenios, aseguró que este plan es “un alivio financiero muy fuerte para este año y el que viene”. Las provincias endeudadas, según el titular del Palacio de Hacienda, “estaban soportando una muy pesada carga en sus pagos anuales de intereses y de capital, producto de las cuasimonedas y endeudamiento de la década del noventa”.

En tanto, con la utilización de los ATN la deuda de las provincias se redujo en 2000 millones de dólares, según está contemplado en el artículo 5 de la Ley de Coparticipación. Boudou destacó la respuesta de los gobernadores que se adhirieron al programa, porque “tuvieron una impronta muy seria al tratar de solucionar los problemas de sus provincias”. Los mandatarios de Corrientes y Mendoza manifestaron que se mantendrían afuera del programa porque no estaban dispuestos a dar marcha atrás con los litigios judiciales que tienen contra el Estado nacional por fondos que no fueron girados. Por eso, de las 18 provincias que podían ingresar al plan, siete quedaron afuera. En tanto, La Pampa, Santa Fe, Santiago del Estero, Santa Cruz, San Luis y la ciudad de Buenos Aires no registran deuda con la Nación.