“Haga valer sus dólares y euros. Tráigalos, que acá pagamos más”, reza la publicidad que ocupa una página en la revista Amano, una publicación de distribución interna en el complejo de Nordelta, donde funciona esta cueva cambiaria, una de las que fueron ayer clausuradas por la AFIP. La Policía Federal, juntamente con personal del ente recaudador, realizó seis allanamientos en “cuevas” de venta ilegal de divisas en el barrio porteño de Palermo y en Nordelta. Según explicó el secretario de Seguridad, Sergio Berni, las cuevas pertenecían a una red de mesas clandestinas de operaciones de divisas, que funcionaban en un local del barrio de Palermo, en el hotel Intercontinental de Nordelta y en un establecimiento de la zona de Liniers. “Esto lo pudimos hacer a partir de una investigación del Juzgado Federal de la doctora Arroyo Salgado, con participación también de la AFIP, la Policía Federal y el Banco Central”, dijo el secretario de Seguridad, durante un operativo que se llevó a cabo en un local en el que funcionaba una mesa de dinero en avenida Santa Fe al 3800, entre Armenia y Malabia.

El subsecretario de Seguridad, Darío Ruiz, explicó que esa investigación se inició a partir de una denuncia contra un contribuyente domiciliado en Nordelta, partido de Tigre, cuyo nivel de vida no coincidía con sus declaraciones impositivas. “Esta persona llevaba una vida ostentosa, con propiedades y autos de lujo que excedían los ingresos que tenía declarados”, agregó el funcionario. En el marco de esta causa, la jueza federal de San Isidro, Arroyo Salgado, ordenó al menos seis allanamientos. “Se ha dado un golpe muy fuerte a esta red que comercializaba moneda extranjera en infracción al régimen penal cambiario”, afirmó Ruiz, quien eludió precisar el monto del dinero involucrado y el número de detenidos.

A partir de la orden judicial, un grupo de 35 efectivos, entre policías, funcionarios judiciales y administrativos, formaron parte de los operativos en los que ya se habían secuestrado dólares, euros y reales que eran comercializados en forma ilegal. Una parte de los efectivos se dirigió durante el mediodía a la esquina de Malabia y Santa Fe, en el barrio de Palermo, donde la Justicia tenía identificados estudios contables y casas de cambio que estaban comercializando dólares, a pesar de las restricciones impuestas por el gobierno para este tipo de operaciones.

Otro grupo de efectivos policiales y judiciales se dirigió al exclusivo country Nordelta, ubicado en el partido de Tigre, donde también habían detectado al menos dos “cuevas” que infringían la Ley Penal Cambiaria. Producto de los decomisos, las autoridades de la AFIP incautaron la revista Amano, de circulación interna, donde se encontraba la publicidad de esta cueva. Se trata del número marzo-abril, cuyo tema central es la “vuelta al cole”. Allí, la cueva había pagado una publicidad de una página, con una foto del Edificio Puerta Norte en el que se identificaba el departamento donde funcionaba con un círculo. “Atención en box privado, con la mayor reserva. Mejoramos cualquier cotización de la zona”, señala la publicidad. La revista servirá como prueba en la causa, según explicaron a este diario fuentes oficiales.

El miércoles, el juez en lo Penal Económico, Marcelo Aguinsky, ordenó que los operativos relacionados con la venta ilegal de moneda extranjera sean encabezados por inspectores del Central y no por los “sabuesos” de la AFIP, y que además haya una autorización judicial previa. La medida se refería específicamente a los “arbolitos” –personas que ofrecen divisas en las principales arterias financieras–, segmento en el que la AFIP puso mayores esfuerzos. De ahora en más, con la autorización judicial, los inspectores de la autoridad monetaria podrán hacer requisas y librar de oficio sumarios cambiarios si encuentran a arbolitos in fraganti o a las denominadas cuevas.