Fuentes del Ministerio de Economía informaron ayer a Página/12 que por ahora no tiene en carpeta un programa de ampliación de la serie de bonos Bonar 24, aunque explicaron que evalúan cada una de las presentaciones que acercan los bancos de inversión. En las últimas horas se había especulado con que Economía estaba trabajando en una nueva emisión de deuda por unos dos mil millones de dólares, lo que motivó al juez neoyorquino Thomas Griesa a solicitar información a los supuestos bancos involucrados en la operatoria. Los rumores daban cuenta de que entre los organizadores de la emisión se encontraban el Deutsche Bank y el JP Morgan, a los que Griesa pidió cualquier documento relevante. Desde el Palacio de Hacienda calificaron este accionar como un nuevo apriete hacia el país para forzar un arreglo con los buitres.

Desde Economía explicaron que reciben a diario ofertas para que el país emita deuda en los mercados internacionales. “Nosotros evaluamos cada alternativa que nos presentan, pero no encargamos a ningún banco la puesta en marcha de un programa de colocación de deuda”, explicó la fuente oficial. Según detallaron, se les había pedido a los bancos mencionados –como a otros en las mismas condiciones– que acerquen la propuesta por escrito para analizarla. “Lo que pasó después fue un tema más promocional. Los bancos salieron a decir que estaban trabajando para la Argentina, pero sólo estaban testeando inversores para darle solidez a la propuesta”, dijo la fuente.

También señalaron desde Economía que las amenazas de Griesa no impedirán una eventual colocación. De hecho, el Bonar 24 ya se emitió en dos oportunidades con relativo éxito en los mercados financieros. “Seguiremos evaluando las propuestas que nos acerquen, las cuales deberán contemplar plazos y condiciones favorables para el país y tener como destino obras de infraestructura”, agregaron.