ECONOMíA › DIPUTADOS LE DIO MEDIA SANCION POR AMPLIA MAYORIA
El Presupuesto pasó cómodo
El oficialismo no debió penar, como con los proyectos de prórroga de la vigencia de impuestos, para aprobar en la Cámara baja el Presupuesto 2006. Ganó la votación en general por 162 a 53.
Por Adriana Meyer
Esta vez no hubo aplausos, casi como una victoria cantada. El oficialismo en la Cámara de Diputados logró aprobar en general la ley de Presupuesto 2006, por una amplia mayoría de 162 votos a favor. Los 53 legisladores restantes que se pronunciaron en contra pertenecen al radicalismo, al ARI y a los partidos provinciales, a diferencia del macrismo de PRO, que apoyó la norma junto a los hombres de Jorge Sobisch. La ley de leyes estima recursos totales para el año próximo de unos 101 mil millones de pesos, gastos por 93,7 mil millones, un crecimiento del PBI del 4 por ciento, un dólar que seguirá valuado en torno de los 3 pesos y una variación de precios implícita del 8,7 por ciento.
Ante el anuncio presidencial respecto del pago de la deuda, el diputado de la CTA Claudio Lozano sugirió que ahora habrá una masa de dinero mayor para modificar los gastos del Presupuesto que se estaba discutiendo. Pero el diputado Carlos Snopek no le dio cabida. “No señor, no hay más plata”, respondió, y siguió con su discurso. “Si en estos años de crisis le hubiera dicho a mi mujer que en este año vamos a poder ahorrar y gastar más en la educación de los chicos, en algún curso de computación, y nos queda un peso para ampliar la casa, ponerle el piso o techarla, les aseguro que mi mujer me hubiese aplaudido y por eso éste es un buen presupuesto”, calificó el diputado Agustín Rossi, presidente de la bancada oficialista.
“Parece pecaminoso tener superávit fiscal, pero en realidad es bueno tenerlo después de tantos años. Estamos orgullosos de la ley de educación técnica y de la de financiamiento educativo que será sancionada en breve”, completó el santafesino. La alusión a la economía hogareña había sido introducida por Elisa Carrió, quien calificó el debate por el presupuesto como una parodia. “Si un ama de casa nos preguntara en qué se van a invertir los impuestos pagados por nosotros, habría que decirle que la respuesta está en estas planillas, salvo que el jefe de Gabinete o determinado ministro o el Presidente decidan otra cosa”, ejemplificó la líder del ARI. “Y si el ama de casa preguntara a quién hay que pedirle cuentas por esto, le diríamos que a Alberto Fernández, pero tampoco podemos porque no viene al Parlamento”, completó Carrió. “Si la señora quisiera saber quién va a pagar la refinanciación del Belgrano Cargas, que va al grupo Macri, al que le sacaron el Correo, la respuesta es: el pueblo”, concluyó. Carrió criticó la subejecución de obras públicas, la concentración de las adjudicaciones en empresas de Santa Cruz, cuestionadas por el saliente ministro Roberto Lavagna, y apuntó al ministro Julio De Vido por no informar el destino de los millones provenientes de la reducción de planes sociales.
Le tocó al presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Snopek, la defensa del proyecto del PEN. “Es el presupuesto de la consolidación, el crecimiento y la distribución del ingreso”, afirmó. A su vez, replicó a los que le atribuyen al presupuesto falencias en materia de distribución de recursos a las provincias. El jujeño remarcó que “del total de gastos consolidados del sector público nacional, superior a los 132 mil millones de pesos, el 47 por ciento son transferencias corrientes de la Nación a las provincias”, una proporción que, según el diputado oficialista, “hace muchísimos años que no se lograba en la Argentina”.
El líder de PRO, Mauricio Macri, debutó cuestionando las partidas subejecutadas y la distribución de la coparticipación, con cifras diferentes a las de Snopek. “Las provincias administran sólo el 23 por ciento de los recursos y esto afecta el principio de autonomía”, afirmó. Por el radicalismo, Miguel Angel Giubergia calificó de “deliberada” la subestimación de recursos que contiene el proyecto presupuestario, al tiempo que denunció la “falta de planeamiento energético” y de control en las empresas concesionadas. En el mismo sentido, se pronunció la diputada del ARI Marcela Rodríguez, cuando afirmó que “el Congreso incurre en una inconstitucionalidad porque no fue conformada la comisión bicameral de seguimiento de las privatizaciones”. Giubergia agregó que el ministerio de De Vido “es el que tuvo mayor aumento de crédito presupuestario, que su cartera asigna discrecionalmente”.
El diputado de la CTA Claudio Lozano presentó un proyecto propio, en el que reflotó el espíritu distributivo del Frenapo (Frente Nacional contra la Pobreza) y recordó que el Presidente y su actual ministra de Economía fueron parte de aquel movimiento. “Este presupuesto encubre un excedente por subestimación de gastos de 12 mil millones, parecido a los anteriores”, explicó. En el recinto pidió que la asignación de esos fondos fuera una decisión del Congreso, pero las autoridades de la Cámara le sugirieron que ese tema lo pueden seguir conversando fuera del recinto, en las galerías del palacio legislativo.