Domingo, 16 de julio de 2006 | Hoy
ECONOMíA › DEL PLAN JEFES AL PLAN DE CAPACITACION. REALIDAD Y DIFICULTADES
La cartera laboral lo implementó como módulo de prueba en ocho distritos, pero captó pocos interesados. A fin de año aspira a llegar a los 100 mil traspasos. Mayor resistencia entre los jóvenes.
Por Fernando Krakowiak
Un informe del Ministerio de Trabajo, al que accedió Página/12, revela que desde que se implementó el seguro de Empleo y Capacitación en abril, sólo 4800 personas optaron por el nuevo programa, el 10 por ciento de los beneficiarios del Plan Jefas y Jefes de Hogar que globalmente hay inscriptos en los ocho distritos en los que se habilitó el traspaso. En la Secretaría de Empleo aseguran que la cifra se elevará al 15 por ciento cuando se sumen quienes aceptaron de palabra, pero todavía no firmaron el convenio. Además, en las próximas semanas se prevé incorporar a otros 91 municipios y abarcar de ese modo al conjunto de las provincias. El objetivo es superar los 100 mil traspasos a fin de año.
La experiencia comenzó en la ciudad de Tucumán y luego se extendió a los municipios de Avellaneda, Moreno, Santa Fe, Ezeiza, Lomas de Zamora, La Plata y Florencio Varela. El principal incentivo que tienen los beneficiarios del Plan Jefas y Jefes para adherir es el aumento que eso supone en su ingreso mensual (de 150 a 225 pesos). El riesgo se basa en la desconfianza que genera pasar a formar parte de un programa donde la ayuda se termina a los dos años, aunque no se haya conseguido empleo.
Para aumentar la tasa de traspasos, las autoridades del Ministerio de Trabajo obligarán a los beneficiarios del Plan menores de 35 años a concurrir a informarse sobre el nuevo seguro, aunque el mismo seguirá siendo optativo. Esta decisión se debe a que los jóvenes se han mostrado más reticentes de lo que se preveía inicialmente. En la Secretaría de Empleo afirman que algunos ven la convocatoria sólo como un control que podría llevarlos a perder el beneficio que tienen. En el caso de los más grandes en edad, también operan como un freno las bajas expectativas respecto de la posibilidad de volver a conseguir un empleo en el futuro.
En el distrito de Santa Fe, por ejemplo, las adhesiones habían sido muy bajas hasta que se decidió convocar a las asociaciones intermedias para dejarles en claro que la intención no era quitarles los planes. Recién entonces, los traspasos comenzaron a aumentar. Hasta el momento, los que optaron por el Seguro de Empleo y Capacitación tienen el siguiente perfil:
- Sexo: El 72,5 por ciento son mujeres, cifra similar al porcentaje que representan en el conjunto del Plan Jefas y Jefes (71,7 por ciento). El dato llama la atención, pues al comienzo se esperaba que el porcentaje de hombres fuera mayor que el que corresponde a la relación en el Plan Jefes. Se supone que las mujeres con hijos tienen más incentivos para pasar al Plan Familias, que es otra de las opciones con las que se las tienta. Sin embargo, la composición por sexo casi ni se alteró.
- Edad: Tanto las mujeres como los varones que optaron por el seguro tienen edades promedio superiores a las correspondientes a los beneficiarios del Plan Jefes. El 58,2 por ciento de las mujeres y el 70,2 por ciento de los varones que ahora son beneficiarios del Seguro de Empleo tienen más de 35 años, mientras que en el Jefes estos grupos etarios concentran el 50,5 y 65,4 por ciento respectivamente. Este es el dato que llevó a los funcionarios de la Secretaría de Empleo a decidir que la consulta para evaluar el traspaso deberá ser obligatoria para los menores de 35 años. Antes de lanzar el seguro, se preveía que los jóvenes serían los más interesados en abandonar el subsidio porque son los que tienen mayores posibilidades potencialmente de conseguir empleo, pero la realidad mostró lo contrario.
- Nivel educativo: Al igual que en el Plan Jefes, el nivel educativo de quienes optaron por el seguro es bajo, aun cuando las mujeres tienen en promedio más años de escolaridad. El 66,8 por ciento de las mujeres y el 82,1 por ciento de los hombres no completó el secundario.
- Experiencia laboral: El 94,4 por ciento de los hombres que optaron por el seguro tiene alguna experiencia laboral previa. El 25,5 por ciento trabajó en la construcción, el 13,1 por ciento lo hizo en alguna industria o taller artesanal y el 5,9 por ciento en el rubro del transporte, fundamentalmente remisería. En el caso de las mujeres, el 86 por ciento tiene experiencia previa. El 17,2 por ciento en el servicio doméstico, el 11 por ciento en tareas administrativas y el 10,8 por ciento en el comercio.
- Relación experiencia-postulación: Quienes optan por el seguro deben decir qué puesto aspiran a conseguir. En el 93 por ciento de los casos, hombres y mujeres se postulan para la actividad en la que se desempeñaban antes de perder su empleo. Ese dato evidencia las bajas expectativas de los trabajadores, pues provienen de empleos de baja calificación y en su gran mayoría no aspiran a conseguir algo mejor. Sólo el 18,3 por ciento de las mujeres y el 11 por ciento de los hombres se postulan para acceder a puestos de trabajo mejor calificados que el que ya tuvieron. En el ministerio aseguran que los cursos de orientación y capacitación que reciben los beneficiarios apuntan a revertir esta situación para que puedan apostar a un puesto de mayor jerarquía, aunque sea en el mismo rubro en el que se venían desempeñando.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.