Macri, Telerman y Filmus están en campaña. Fernando Zumbado Jiménez, ministro de Pobreza y Vivienda de Costa Rica, también. Los primeros tres, para ser jefe de Gobierno porteño. El restante, para que el Parlamento de aquel país apruebe el proyecto que impulsa su gobierno para crear el “impuesto solidario para el fortalecimiento de programas de vivienda”. Macri, Telerman y Filmus se cansaron de caminar la ciudad. Zumbado en cambio se fue a dormir el martes pasado a una villa para llamar la atención. El trío local se la pasa prometiendo planes de vivienda para la población en asentamientos y urbanización de villas. Los considerando de la ley que promueve el gobierno socialdemócrata de Oscar Arias plantea “el firme propósito de erradicar los asentamientos precarios y mejorar los barrios más humildes”. Macri, Telerman y Filmus no explicaron cómo van a cubrir el gasto que representa concretar todas sus propuestas. Zumbado Jiménez aprovechó el revuelo armado para explicar que el programa se financiará con el nuevo impuesto que grava las viviendas de lujo. La ciudad de Buenos Aires recauda muy poco por impuesto inmobiliario, debido fundamentalmente a que las propiedades más caras están ridículamente subvaluadas: sobre un total de 1.650.000 partidas, el 93 por ciento tiene una valuación fiscal inferior a los 69.000 pesos y las alícuotas están lejos de compensar esa inmensa desproporción. En Costa Rica no están conformes con lo que recaudan, al punto de que el mencionado proyecto sostiene que “tenemos un sistema tributario de país subdesarrollado y una aspiración de gasto de país desarrollado”. Ninguno de los candidatos con chance el domingo plantea corregir esta situación. El impuesto solidario deja exentas a las propiedades de hasta 100 millones de colones, que al cambio de hoy equivale a unos 192.000 dólares, y grava con una alícuota progresiva que comienza en el 0,25 por ciento las viviendas que tengan un valor de mercado –lo aclara expresamente– desde 192.000 a 1,4 millón de dólares, y que llega al 0,55 por ciento para la franja superior. Costa Rica es por lejos el país de Centroamérica donde mejor se vive, con un ingreso per cápita similar al de la Argentina. Es famosa por haber abolido el ejército, por tener como presidente a un Premio Nobel de la Paz y los que la conocen aseguran que es excepcional para hacer turismo.

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