Los mercados financieros continuaron ayer la racha positiva, y el índice de acciones líderes MerVal quedó a un paso de quebrar su record. Ayer subió 0,2 por ciento y quedó en 2291,84 puntos, apenas medio por ciento debajo del máximo logrado el 23 de julio último. El buen contexto internacional impulsó a los bonos, que treparon hasta 4,1 por ciento. En la city aseguran que, por primera vez desde las turbulencias, hay fondos extranjeros invirtiendo en papeles locales.

El título público que más subió fue el Par nominado en dólares, mientras que la versión en pesos ascendió el 2,2. El resto de los títulos públicos mejoró entre 0,8 y 2,0 por ciento. El cupón atado a la evolución del Producto, en pesos, avanzó nada menos que el 7,4 por ciento. El índice de “riesgo país” cayó un 4,2 por ciento y quedó en 388 puntos.

La clave de la mejora del clima financiero fueron las noticias internacionales. Ayer se conocieron las minutas de la última reunión de la Reserva Federal, del pasado 18 de septiembre, que permitieron saber que la rebaja de medio punto en la tasa decretada ese día fue respaldada por unanimidad en el directorio. “(Esa medida) era lo más prudente para ayudar a prevenir algunos de los efectos adversos que podrían afectar a la economía”, indicaron las actas de la FED.

Esta declaración no hizo más que afianzar la sensación de los inversores, tanto en Wall Street como en la city porteña, de que la Reserva Federal volverá a disminuir el costo del dinero a fin de mes, en la próxima reunión de directorio. Ante esa probabilidad, los activos financieros subieron otra vez y quebraron marcas en distintos recintos. Ese fue el caso del índice Dow Jones de la Bolsa de Nueva York, que subió 0,9 por ciento, mientras que el Standard & Poor’s 500 (panel en el que están listadas las principales 500 compañías estadounidenses) avanzó el 0,8. En Europa, las subas fueron de entre 0,4 (Madrid) y el 1,1 por ciento de Londres. En San Pablo, Brasil, se anotó un record tras la suba del 1,4 por ciento en el índice Bovespa.

La baja de la tasa en Estados Unidos y la perspectiva de que esa tendencia se afianzará en las próximas semanas acrecentó el apetito de los inversores por tomar riesgo en los mercados. La multimillonaria intervención de la Reserva Federal y el Banco Central Europeo asegurando liquidez a los bancos y la posterior flexibilización del mercado monetario dejó la certeza a los financistas de que los países centrales no quieren un shock en los mercados. En sus minutas la FED lo señaló con claridad, al admitir los riesgos de un freno en la economía estadounidense.

El cambio de escenario se expandió rápidamente por los principales mercados y por algunos emergentes, como Brasil y México. La Argentina había quedado rezagada. Los títulos públicos no se recuperaban a pesar de lo que ocurría en los países vecinos. El fuerte ingreso de capitales a Brasil hizo que el real tocara el nivel máximo en siete años: 1,80 por dólar.

Los precios de liquidación de los bonos locales están a la vista: un Discount en pesos tiene un rendimiento implícito de 7,5 puntos más la inflación. Un Bonar en pesos a diez años rinde un 17,5 por ciento. Y un Previsional con vencimiento el año que viene, alrededor de 7 puntos más CER. Estos precios empezaron a tentar a inversores locales y extranjeros. El volumen operado ayer en la city fue de lo mejor en las últimas semanas: 105 millones de pesos en acciones y otros 160 millones en títulos públicos.