El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, afirmó que con el anuncio del Plan Estratégico Agroalimentario 2010-2016 “se puso en marcha un viejo reclamo que tenían los sectores” de la actividad agropecuaria. “El sector agropecuario viene reclamando previsibilidad y construcción de certezas (...). Es necesario construir reglas, institucionalizar la operación de los mercados y consolidar el derecho de los pequeños y medianos productores, para garantizarles precios y producción.”

Hugo Biolcati, presidente de la Sociedad Rural, remarcó sin embargo que el conflicto entre el ruralismo y el Gobierno “sigue vivo”. “Es difícil decir que esto se desactiva, porque se van a analizar políticas de mediano y largo plazo mientras se cierran exportaciones”. En lenguaje ambiguo, el jefe de la familia que posee la mayor cantidad de tambos del país, con 120 mil litros de leche entregados por día, consideró que el plan “puede que sea un indicio de un cambio de relación” y “el principio de un trabajo hecho con seriedad”, pero “en este momento es una página en blanco”.