La AFIP realizó ayer una presentación ante la Justicia para evitar que un directivo de Donnelley salga del país. El organismo informó que el juez Gerardo Santicchia aceptó la solicitud y rechazó la salida del empresario Claudio Raúl Vergara, quien había pedido permiso para viajar a México. La gráfica Donnelley resolvió en los primeros días de agosto presentar un pedido de quiebra, la cual fue concedida en un tiempo record de 48 horas por la Justicia. La entidad recaudadora inició acciones legales para revocar la medida, puesto que la consideró fraudulenta debido a que no había motivos de tipo económico. La AFIP precisó que su objetivo es dar estabilidad laboral a 400 empleados de la firma al tiempo de asegurar la recaudación de recursos para la seguridad social.

La AFIP aseguró ante las autoridades judiciales que la empresa norteamericana no tuvo motivos para presentarse en quiebra. Mencionó que los balances de la firma computaron al 31 de diciembre una liquidez de 600 millones de dólares, superior a la de 2012. A su vez, precisó que la firma no contaba con deudas tributarias a principio de julio, mientras que los activos contables superaban ampliamente a los pasivos, para computar un patrimonio neto positivo de 180 millones de pesos.

Además, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, sostuvo que la empresa registró ganancias reservadas por 20 millones de pesos para futuras distribuciones de dividendos, al tiempo que la firma había recibido un aporte de sus accionistas por tres millones de pesos. Frente a esta situación, la entidad recaudadora denunció que la convocatoria de acreedores de Donnelley fue fraudulenta (sin justificaciones económicas para explicar el parate de las actividades). Los trabajadores transformaron la empresa en cooperativa para continuar operando.