El presidente francés, Nicolas Sarkozy, repartió felicitaciones entre sus colegas de Ecuador y de Argentina por el papel que jugaron en las gestiones previas al rescate de Ingrid Betancourt. Los detalles de la impactante operación siguen dando que hablar. Desde el gobierno colombiano dijeron que el rescate debió ser adelantado unos diez días de la fecha planeada por temor a que se produjeran filtraciones en la guerrilla. Y salieron a defender la Operación Jaque de las versiones que señalan la existencia de un pago por el rescate de los prisioneros (ver página 26). “No tiene posibilidades de ser desprestigiada porque produjo los resultados que todos hemos visto”, dijo el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos.

Después de recibir a Ingrid Betancourt en París, el presidente francés, Nicolas Sarkozy –uno de los mayores impulsores de las gestiones previas por la libertad de Betancourt–, levantó el teléfono y agradeció. “Su papel fue determinante en la liberación de Ingrid Betancourt”, le dijo Sarkozy a la presidenta Fernández de Kirchner en una charla telefónica. Y agregó que “el pueblo y el gobierno francés nunca olvidarán ese gesto, se lo agradecemos eternamente”. Por su parte, la mandataria argentina retribuyó el agradecimiento y le dijo a Sarkozy “que la historia también le reconocerá el rol activo que tuvo en la liberación”.

Los agradecimientos del presidente galo también llegaron a Ecuador. “Me llamó para agradecer al gobierno ecuatoriano todos los esfuerzos, porque a Francia la teníamos informada de todos los esfuerzos que estábamos haciendo para liberar a Ingrid Betancourt. En buena hora que la liberaron con esa operación, que fue riesgosa”, declaró el presidente ecuatoriano, Rafael Correa.

El mandatario aprovechó la ocasión para pegarle al gobierno de Bogotá, con el cual cortó las relaciones diplomáticas el 1º de marzo, después de que el ejército colombiano bombardeara el campamento de las FARC en Ecuador. “Cuando reventaron a Raúl Reyes en territorio ecuatoriano estábamos negociando la liberación de Ingrid Betancourt, de nuevo había pequeños indicios de que las FARC querían retomar conversaciones para liberarla en territorio ecuatoriano”, señaló.

Según se informó desde París en un comunicado, en los próximos días Sarkozy extenderá su gratitud al presidente venezolano, Hugo Chávez.

Mientras, desde la localidad madrileña de Navacerrada, el ministro colombiano de Defensa, Manuel Santos, explicó que en principio estaba previsto que la operación se desarrollara en un plazo de diez días, pero se adelantó. “Cuando vimos que el pez había mordido, la aceleramos al máximo. El riesgo de que se filtrara cualquier cosa o de que ellos se pudieran comunicar con alguien del secretariado que les desmintiera la novela que les habíamos vendido era muy grande”, dijo, aunque matizó que el peligro para los secuestrados era mínimo. A modo de ejemplo, sostuvo que en el caso de que los agentes fueran detectados antes de llegar a la zona, lo más probable era que la guerrilla escapara con los secuestrados. Según explicó, quienes corrían el mayor peligro eran los agentes infiltrados y la tripulación del helicóptero, y destacó que en realidad no se trató de una operación militar sino de Inteligencia.

Santos aprovechó el discurso que dio en la española Fundación FAES –que dirige el ex presidente español José María Aznar– para refutar los argumentos de los que sostienen que todo fue un montaje y que detrás del rescate hubo un pago. “Para las FARC es mucho más humillante que uno de sus comandantes se venda por un puñado de dólares y entregue semejante tesoro que lo que sucedió, que es que fueron engañados”, sostuvo.

El viernes, la Radio Suiza Romande había informado que por la liberación de los rehenes los hombres de las FARC recibieron unos 20 millones de dólares. La suma se la habrían hecho llegar a través de la mujer de un jefe guerrillero. “Todos lo han negado categóricamente”, dijo Santos, en referencia a los cinco gobiernos que habrían desembolsado el dinero. Respecto de la supuesta intermediaria, el ministro señaló que “ya negó que ella hubiera tenido nada que ver”, entre otras razones porque “está separada desde hace mucho tiempo”.

Desde el escenario, Santos citó otra acusación, según la cual en el rescate se utilizaron emblemas de organizaciones internacionales. “La orden era clara y perentoria, clarísima y categórica”, dijo, en el sentido de no suplantar a ninguna institución. La versión del gobierno colombiano es que estos supuestos no son más que inventos para tratar de desprestigiar unos hechos “que hablan por sí mismos: 15 secuestrados liberados sin disparar un solo tiro ya están con sus familias”, según manifestó el ministro.

Tras subrayar que la Operación Jaque fue exclusivamente desarrollada por Colombia, en su defensa Santos recurrió a la pesca. “Pusimos la carnada, el pez mordió y apenas mordió fuimos a ver al presidente para ver si podíamos sacar el pez del agua”, dijo. Como en el río, “hay que hacer que el anzuelo se agarre y sacarlo rápido, si no se te escapa, y eso hicimos”, agregó.