Colombia amaneció entre alborotos tras las elecciones legislativas. La lentitud en el conteo y la falta de transparencia en los informes son cuestionadas por el gobierno y los políticos, y se anunció que las elecciones del Parlamento Andino tendrán que repetirse. Con la victoria del uribismo, la renuncia del líder del partido opositor y la derrota de los independientes, el panorama para las presidenciales se va trazando a favor de los oficialistas. Mientras, la tensión aumenta entre los conservadores, pues recién mañana se sabrá quién fue el elegido por sus partidarios para candidato presidencial.

Por su parte, Juan Manuel Santos, candidato a la presidencia por el Partido de la U, celebra que su partido obtuvo la mayoría del Congreso, como hace cuatro años, y lo asume como un dulce anuncio de su victoria en las elecciones presidenciales. Con el escrutinio del 30 por ciento de las mesas, el domingo la Registraduría Nacional daba como ganador al Partido Conservador. Pero en la madrugada de ayer, cuando se superó el conteo del 90 por ciento de las mesas, se confirmó que el Partido de la U sobrepasó a todos y consiguió poner 28 de 100 senadores, mientras los conservadores obtuvieron 21 escaños.

Santos asegura que el 30 de mayo, cuando se celebre la primera ronda de votaciones presidenciales, él arrasará en votos y no tendrá que competir en una segunda vuelta, que se realiza cuando ningún candidato supera el 50 por ciento. Pero los casi cinco millones de votos que logró la U en la jornada de ayer le dan a Santos esa certeza. “Los resultados de las elecciones fueron un gran respaldo a lo que el presidente Alvaro Uribe ha sembrado. La mayoría conservadora y de la U garantizará la gobernabilidad a partir del 7 de agosto (fecha de posesión del nuevo presidente)”, afirmó el ex ministro de Uribe, quien agregó que para él “la campaña presidencial comienza ahora”.

Los líderes de los partidos opositores e independientes reconocieron ayer su derrota. El presidente del Polo Democrático Alternativo, Jaime Dussán, renunció en la mañana apenas confirmó que perdió su curul en el Congreso. En una carta enviada al candidato presidencial por ese partido, Gustavo Petro, Dussán afirma: “Nuestras expectativas eran superiores, incluyendo mis posibilidades de continuar en el Congreso”. La renuncia se asume con un retroceso más del Polo, que en estas elecciones perdió cuatro plazas en el Senado. Para Petro, el partido “se estancó”.

El presidenciable Sergio Fajardo, de Compromiso Ciudadano, reconoció que perdió en las elecciones legislativas, pues apenas un puesto fue para su movimiento. Le echó la culpa a la falta de difusión de su campaña en los medios de comunicación, y aseguró que “por ahora seguiremos trabajando” sin aliarse con otros partidos. Sin embargo, las parlamentarias dejaron un resultado refrescante. El Partido Verde que eligió al académico Antanas Mockus como su propuesta de reemplazo para Uribe consiguió cinco curules en el Senado. Su filosofía se basa en la ética. Todo lo contrario del también ganador Partido de Integración Nacional (PIN), que reunió a los herederos de los ex congresistas parapolíticos y narcos que alcanzaron ocho puestos en el Senado. En la Cámara de Representantes, cuyo escrutinio iba hasta ayer por el 40 por ciento, aparecían en cuarto lugar como partido, lo que algunos analistas calificaron como la más grande derrota de la democracia.

En el Partido Conservador, el otro ganador de la jornada, la armonía se ve amenazada por la falta de claridad en la información entregada por la autoridad electoral. De domingo a lunes la Registraduría cambió en tres ocasiones el nombre del ganador de la consulta interna que definirá su candidato presidencial. Voto a voto, Andrés Felipe Arias y Noemí Sanín se pelean el primer lugar. Solo hasta el miércoles, según la institución, se terminará el conteo y se dará un resultado definitivo, lo que ambos políticos han recibido como “muy raro”, pues por años esta entidad se caracterizó por su agilidad.

Ante las irregularidades de la Registraduría, el gobierno nacional le pidió al Consejo Nacional Electoral que asuma, desde cero, el proceso de escrutinio de las elecciones. La Procuraduría pidió a los procuradores provinciales “ejercer estricta vigilancia” en los conteos de votos de la consulta conservadora. También los directivos de UNE, empresa encargada del manejo técnico del proceso electoral, fue llamada a dar explicaciones por los enredos en la información entregadas. Por la mayoría de votos en blanco en las elecciones de cinco delegados al Parlamento Andino, éstas tendrán que repetirse.