Después de tres meses, la oposición finalmente logró dar el primer paso para evitar que el gobierno nacional utilice reservas del Banco Central para el pago de deuda. Nueve miembros de la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo firmaron ayer el dictamen aconsejando que se declare la “nulidad absoluta e insanable” de los DNU 296/10 y 298/10, que derogaron el Fondo del Bicentenario y constituyeron el Fondo de Desendeudamiento, respectivamente. Los representantes del oficialismo no participaron de la reunión y, en cambio, el jefe del bloque de Senadores, Miguel Pichetto, aseguró que el dictamen “es absolutamente nulo”, ya que todavía la Justicia no se expidió sobre el recurso de amparo presentado por el Frente para la Victoria en contra de la nueva conformación de la comisión bicameral. Los opositores no perdieron un solo minuto y ayer mismo el nuevo presidente de la comisión, Rubén Lanceta, elevó el dictamen a los dos cuerpos legislativos para acelerar su paso a las cámaras.

No todo fue tan fácil para la oposición. Los opositores transpiraron un largo rato cuando tuvieron que estirar la reunión porque el senador radical Ramón Mestre no llegaba. A las 18.20 comenzó a debatir la comisión con ocho de sus miembros, mientras esperaban la aparición del cordobés para obtener el quórum y poder emitir dictamen. El fantasma de frustraciones pasadas como el faltazo de Carlos Menem a la sesión preparatoria en el Senado generó cierto temor entre los legisladores. Pero Mestre se demoró por un retraso en un vuelo de Aerolíneas Argentinas proveniente de Córdoba, que salió más de una hora tarde y por eso llegó, agitado y sin corbata, a las 19.

“Este dictamen es absolutamente nulo, ya que es producto de una constitución irregular de la Comisión, algo sobre lo que se tiene que expedir la Justicia en función de la cautelar autónoma que presentamos”, afirmó ayer Pichetto, quien recusó ayer por la mañana al juez Ernesto Marineli (ver aparte). El senador rionegrino advirtió que el nuevo magistrado deberá evaluar el recurso en el que plantearon “que esta constitución que arbitrariamente ha hecho la oposición es totalmente irregular, al igual que este dictamen”.

Al recinto

Después de atragantarse el rechazo del DNU en la sesión especial convocada la semana pasada, la oposición considera que ahora –salvo que el juez de lugar al recurso kirchnerista– cumple los requisitos formales necesarios para tratarlo en los respectivos cuerpos. Pero más allá de la ansiedad, la diputada Marcela Rodríguez, de la Coalición Cívica, todavía no se animaba a confirmar que el dictamen pase al recinto mañana mismo. Eso deberá resolverse hoy por la tarde entre los presidentes de bloque en la reunión de Labor Parlamentaria de Diputados. Si no hay acuerdo, la oposición deberá juntar los 129 diputados que alcanzan el quórum para declarar la invalidez del DNU.

En el Senado, en cambio, el escenario es aún más abierto. La reunión de Labor se produciría el miércoles por la mañana, el mismo día en que se prevé la sesión. Pero el kirchnerismo ya adelantó que sólo aceptará el tratamiento del pliego de la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, y de la coparticipación del impuesto al cheque.

Los plazos

Quince minutos antes de las nueve de la noche, un funcionario del Poder Ejecutivo ingresó el DNU al Congreso. Walter Abarca, subsecretario de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete, afirmó que los diez días de plazo para remitir el decreto se cumplían a la medianoche de ayer, por lo que se encontraban perfectamente dentro de los límites establecidos en el reglamento de la comisión. Más temprano el diputado Lanceta había considerado que el plazo se había terminado el jueves 11. En rigor, el artículo 12 del reglamento establece que el Poder Ejecutivo debe someter el decreto a consideración de la Comisión Bicameral “dentro de los diez días de dictado”. Como no se especifica si se trata de días hábiles o corridos, oposición y oficialismo interpretaron el texto según su conveniencia.

El Frente para la Victoria analizará hoy si decide nuevamente recurrir a la Justicia para plantear esta cuestión, ya que el artículo 18 del reglamento estipula que recién en caso de que el jefe de Gabinete no remita en el plazo establecido los DNU, dicha comisión podrá “abocarse de oficio” a su tratamiento.

Por otra parte, en el artículo 21 se establece que una vez elevado por la comisión el dictamen al plenario de ambas Cámaras, “éstas deben darle inmediato y expreso tratamiento”.

Autoridades

Dado que este año la presidencia de la comisión bicameral le corresponde a un diputado, los opositores eligieron al radical Rubén Lanceta, como su titular, dejando la vicepresidencia a designar por el oficialismo. En la secretaría recayó el diputado peronista disidente Enrique Thomas.