El viceministro español de Exteriores, Iñigo Méndez de Vigo, llamó ayer a Alemania a mostrar más solidaridad y le recordó las ayudas que recibió su país en el marco del Plan Mar-shall. Méndez de Vigo remarcó también que Alemania se ha beneficiado como ningún otro país con las exportaciones dentro de la Unión Europea (UE).

“Tras la Segunda Guerra Mundial se ayudó mucho a Alemania en una situación mucho más complicada. Muchos países hicieron sacrificios financieros en favor de Alemania. Es algo que Alemania no debería olvidar”, previno el ministro español en una entrevista que publicó el periódico Bild. Al mismo tiempo, el viceministro advirtió a políticos alemanes del peligro de provocar la quiebra de Grecia mediante un debate público. “Considero que es muy peligroso lo que está pasando ahora en Alemania. Uno tiene la sensación de que algunos políticos quieren desencadenar la suspensión de pagos con sus declaraciones. Me pregunto si son conscientes de las consecuencias”, agregó. Méndez de Vigo hizo alusión al ministro de Economía y vicecanciller alemán, Philipp Rösler, quien días atrás habló y luego reiteró abiertamente sobre la posibilidad de que Grecia abandone el euro. El funcionario español definió a la UE como una familia en la que los miembros se tienen que ayudar entre sí en situaciones difíciles y señaló que, actualmente en medio de duras reformas, España necesita ayuda para el sector bancario. “Se trata de créditos”, comentó. Además, manifestó que ante la situación actual no se debe pensar tanto en los intereses nacionales. “No se trata de Alemania, España o de otros países miembro, somos la UE y sólo podemos tener éxito como conjunto”, expresó.

El miembro del gobierno de Mariano Rajoy aseguró que la situación en su país es muy diferente de la de Grecia y demandó la intervención del Banco Central Europeo (BCE) para poner coto a las tensiones en los mercados que atenazan a España. “Nuestra economía es fuerte, el Estado funciona y estamos afrontando los problemas. Pero ahora tiene que moverse el Banco Central Europeo para poner fin a los intereses absurdamente elevados para los títulos de deuda española”, indicó. “La situación es grave. El BCE tiene que actuar y mostrar firmeza”, insistió.