El ejército israelí comenzó ayer a desplegarse en los alrededores de la Franja de Gaza como parte del operativo de seguridad tras la muerte de tres estudiantes judíos. Además, continuaron los bombardeos contra objetivos palestinos, en los que al menos diez personas resultaron heridas. Según medios locales, el despliegue de las tropas israelíes es en respuesta al lanzamiento de varias andanadas de cohetes desde la Franja hacia el sur de Israel. De acuerdo con las autoridades de Tel Aviv, con los últimos operativos asciende a más de 475 la cifra de palestinos detenidos en Cisjordania, aunque organizaciones palestinas elevan el número a cerca de 600.

El ejército se prepara para la posibilidad de que se desencadene un enfrentamiento en la zona, ya que Israel considera al movimiento islamista Hamas responsable directo del disparo de los proyectiles desde ese territorio palestino. Según datos del ejército israelí, un total de 16 proyectiles fueron disparados desde la medianoche del miércoles, y al menos tres de ellos causaron daños materiales, sin provocar pérdidas humanas. Las autoridades israelíes creen que Hamas comenzó a disparar cohetes en respuesta al linchamiento del joven Mohamed Abu Jadair, de 16 años, cuyo cadáver apareció quemado y con signos de violencia en un bosque de Jerusalén, presuntamente a manos de radicales judíos.

La policía israelí investiga la posibilidad de que este crimen sea una venganza por el asesinato de los tres estudiantes judíos cuyos cadáveres aparecieron el lunes, en un valle de Cisjordania, y de cuya muerte Israel responsabiliza al movimiento islamista que lidera en la Franja de Gaza. Además del despliegue de tropas, fuentes palestinas informaron del movimiento de embarcaciones militares israelíes frente a las costas de la Franja, algo que interpretan como signo de que Israel se prepara para algún tipo de incursión.

En medio del operativo israelí, trece palestinos fueros detenidos en diferentes lugares de la Cisjordania ocupada, donde además se cerraron dos instituciones caritativas vinculadas con Hamas, informó el ejército israelí. Por su parte, fuentes palestinas denunciaron que los soldados israelíes detonaron una carga explosiva para entrar en una de esas instituciones en el área de Beit Kahil, cerca de donde fueron hallados los cadáveres. Los uniformados se llevaron documentación en medio del lanzamiento de piedras por parte de habitantes de la zona, afirmaron las fuentes.

En tanto, al menos diez personas resultaron heridas, una de ellas de gravedad, por los bombardeos nocturnos de la aviación israelí sobre Gaza. La aviación atacó de forma precisa 15 posiciones islamistas, en represalia por el disparo de una veintena de cohetes desde la tarde del miércoles, confirmó un vocero no identificado del ejército israelí.

Asimismo, otras tres personas resultaron heridas por disparos israelíes en Srif, al norte de Hebrón, cuando los soldados intervinieron para detener un enfrentamiento entre vecinos y un grupo de colonos ultranacionalistas que rodearon una casa. Así lo informó la agencia de noticias Maan, que agregó que las tropas israelíes penetraron en el campo de refugiados palestinos de Al Arrub, en Hebrón, donde registraron viviendas.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, anunció que el operativo se ampliará y se extenderá durante el tiempo que su país considere necesario y que su objetivo, junto a la búsqueda de los autores, es debilitar toda la estructura en Cisjordania de Hamas, que no reivindicó la acción.

En tanto, la ministra israelí de Justicia, Tzipi Livni, pidió que se adoptaran medidas para combatir el “terrorismo interno” en Israel, después de los últimos actos y la incitación a la violencia de grupos radicales judíos contra palestinos. La funcionaria precisó que, al igual que el ejército es responsable de luchar contra el terrorismo palestino, la policía tiene la misma tarea a la hora de combatir el terrorismo “interno” o judío. “No debemos confundirnos. No debemos permitir que ningún ciudadano tome justicia por mano propia, incluso en los momentos más difíciles”, manifestó Livni. En este sentido, el presidente saliente, Shimon Peres, instó a los ciudadanos de su país a abstenerse de llevar a cabo provocaciones. “Como presidente del Estado de Israel les digo a todos los ciudadanos, con seriedad, que es tiempo para dos cosas: respetar la ley y evitar las provocaciones”, aseveró en un mensaje especial enviado a los medios.