Los soldados estadounidenses actuaron de forma correcta en la presunta matanza de civiles en la ciudad iraquí de Ishaqi. Así lo determinó una investigación militar norteamericana, que exoneró ayer a los marines implicados en la muerte de 11 civiles denunciada por la BBC de Londres, que trasmitió esta semana un video con imágenes de la presunta masacre. El informe concluyó que los soldados respetaron las reglas de acción vigentes en Irak, lo que despertó la furia del gobierno del país árabe, que prometió llevar a cabo su propia investigación. La otra masacre que está siendo investigada es la de la ciudad de Haditha, donde murieron 24 civiles, y por la cual el gobierno iraquí pidió una “disculpa oficial” a Estados Unidos. Esto muestra un cambio en las relaciones entre ambos países, ya que los anteriores gobiernos iraquíes habían permanecido desde la invasión más o menos fieles a las instrucciones de Washington. Ahora, sin embargo, no tienen miedo de enfrentarse a los norteamericanos y denunciar los excesos de los marines.