Los mandatarios de la región ratificaron ayer su apoyo a la iniciativa de Unasur de mediar en el conflicto boliviano.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo que el gobierno y la oposición de Bolivia deberán acatar lo que decida Unasur. “Si la reunión se mantiene, yo voy. Sin embargo hay que tener en claro que no tenemos derecho a tomar ninguna decisión sin que estén de acuerdo el gobierno y la oposición de Bolivia”.

Por su parte, el presidente colombiano Alvaro Uribe confirmó que también irá a la cumbre de mañana en Santiago. El viernes, el gobierno colombiano expidió un comunicado expresando su “apoyo” al presidente boliviano, Evo Morales, y llamó “a todas las partes para que se propicie el clima adecuado para retomar el diálogo y evitar la violencia en el país”.

El mandatario Rafael Correa anticipó su total apoyo al gobierno boliviano en Santiago. “Se ha convocado esa reunión urgente de la Unasur y nos reuniremos los presidentes de toda Sudamérica para dar el total respaldo al compañero Evo”, dijo Correa. “La oposición es una absoluta minoría separatista, oligarca de lo que llaman la Media Luna, sobre todo el departamento de Santa Cruz”, agregó.

También el presidente paraguayo, Fernando Lugo, confirmó su participación en la cumbre y expresó su solidaridad con su par boliviano. “Paraguay estará solidario con todos los países si los gobiernos han sido elegidos democráticamente... y en ese sentido, el gobierno de Bolivia y su presidente han sido elegidos democráticamente”, afirmó.