El candidato oficialista de la Concertación chilena, el ex mandatario democristiano Eduardo Frei, admitió ayer que en una eventual segunda vuelta podría llegar a aliarse con los otros dos candidatos progresistas, el comunista Jorge Arrate y el independiente Marco Enríquez-Ominami. El objetivo es uno solo: derrotar al candidato de la derecha, el empresario multimillonario Sebastián Piñera. “Estoy seguro de que la gran mayoría de esos votos me van a apoyar”, señaló Frei a diez días de las elecciones generales, tras lo cual admitió contactos con ambos candidatos. “Y sí, la gente se reúne, conversa”, deslizó. “La tarea de nuestro proyecto es hacer una propuesta atractiva para los sectores progresistas de Chile en todos los campos: en el tema constitucional, en el tema laboral, en el tema de las reformas políticas, en los cambios en salud y educación y en los cambios culturales”, agregó Frei.