El izquierdista Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos (del que su partido, el PRD, es el más importante), colocó bajo la lupa al Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), que mantiene al derechista Felipe Calderón un punto por encima de él en la disputa de la presidencia de México, cuando se habían contabilizado 127.143 mesas electorales de las 130.788 instaladas para los comicios del 2 de julio.

El experto en derecho electoral Raúl Avila Ortiz comentó que la “historia de las elecciones presidenciales, absolutamente, no está escrita, porque la diferencia es de poco más de un punto, unos 400 mil votos”, y cuando se haga el recuento en los 300 distritos electorales en que se divide el país, “con las actas” de todos los colegios electorales las cosas pueden cambiar o se confirmarán. Esto comenzará a realizarse, por ley, desde mañana. El PREP cerró oficialmente a las veinte horas de ayer. No se llegó a contabilizar el ciento por ciento de las mesas electorales.

Avila Ortiz valoró el programa como altamente confiable, pero insistió en que en una elección tan cerrada como ésta, hay que esperar a que se haga el recuento y se tengan todos números. Esto se debe a que el PREP no tiene en cuenta todos los votos, sino que toma una muestra representativa para calcular una tendencia. Este sistema tiene un margen de error de entre el dos y el tres por ciento –cifra mayor a la ventaja que mantiene actualmente Calderón–.

El profesor Ortiz llamó la atención sobre otro asunto de suma importancia en el actual proceso electoral mexicano: si quedan colegios electorales del norte y del sur por escrutar, es probable que la diferencia actual de votos entre Calderón y López Obrador se mantenga; pero si los votos son de la región sureña puede modificarse la tendencia. Según las encuestas, el norte mexicano votó mayoritariamente por la derecha y el sur, por la izquierda. En todo caso, Avila recordó que el PREP es un programa preliminar que recaba datos transmitidos por teléfono, fax o Internet al Instituto Federal Electoral (IFE) y que el miércoles deben avalarlos oficialmente.

Lo cierto, hasta ahora, es que mañana comenzará el conteo voto por voto, a nivel distrital. Recién el domingo el IFE recopilará los resultados finales de cada estado para obtener la cifra nacional definitiva. No se puede descartar una posible impugnación de este resultado por parte de alguno de los candidatos; sin embargo, la ley electoral mexicana establece un plazo máximo para todo el proceso: el 2 de septiembre.

* De El País de Madrid. Especial para Página/12.