El Gobierno pareció no darle demasiada entidad a la protesta de la Federación Agraria ayer en Gualeguaychú. Los funcionarios consultados por PáginaI12 eludieron hacer una evaluación y prefirieron concentrarse en el regreso de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que anoche llegó a Olivos después de pasar el fin de semana largo en El Calafate. Uno de los pocos funcionarios que hicieron mención al tema sólo recordó que el diálogo con las cámaras agropecuarias lo está llevando adelante la Secretaría de Agricultura.

Algo similar había dicho el domingo el vicepresidente Julio Cobos. “Es una lástima. Se está dialogando con la Secretaría de Agricultura, con los gobernadores, hay que tener paciencia”, señaló. Justamente Cobos fue quien, junto a la oposición, votó contra el proyecto del Gobierno que proponía una serie de beneficios para los pequeños y medianos productores nucleados en la Federación Agraria. Esa votación que rechazó las retenciones móviles implicó que los grandes productores tributen un 12 por ciento menos y los pequeños un 10 por ciento más de lo que hubiera correspondido si se aprobaba el proyecto oficial.

Después del conflicto de los empresarios del campo con el Gobierno la relación obviamente quedó tirante. De hecho, ningún funcionario del Gobierno fue a la exposición de la Sociedad Rural en Palermo, por donde, en cambio, desfilaron casi todos los dirigentes opositores y el vicepresidente Cobos. De todas maneras, luego el Gobierno hizo algunos gestos de acercamiento, como, por ejemplo, aceptar el reclamo de las cámaras agropecuarias de que el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, las recibiera en conjunto como integrantes de la llamada Mesa de Enlace, y no individualmente, como había dispuesto en un principio.

En cuanto a la expectativa sobre decisiones que a veces suele tomar la Presidenta en la intimidad del descanso sureño, nada pudo develarse anoche. Aun así, fuentes del Gobierno le dijeron ayer a PáginaI12 que difícilmente esta semana haya alguna definición sobre cambios en el Indec, uno de los temas que vienen agitando las aguas desde hace tiempo.

“Yo creo que en algún momento va a haber cambios, pero no esta semana”, dijo un funcionario consultado por este diario. Una de las versiones más fuertes de las que circularon la semana pasada en los pasillos de la Casa Rosada indicaba que posiblemente la Presidenta resuelva a reemplazar a la conducción del Indec, poniendo a la cabeza a un técnico, para después implementar un método de medición de la inflación que tenga consenso.

Las versiones también crecieron al influjo de la suma de declaraciones de influyentes dirigentes kirchneristas –como los diputados Agustín Rossi, Carlos Kunkel y Patricia Vaca Narvaja y la ministra de Defensa, Nilda Garré– abogando por una mayor transparencia en el índice de precios.

En cambio, una de las decisiones de la Presidenta que sí trascendieron es que el Gobierno, a través del Banco de la Nación, continuará hoy con la recompra de bonos, en la que la semana pasada invirtió 270 millones de dólares e hizo que las cotizaciones, en promedio, subieran un 11 por ciento. Hoy la Presidenta tendrá su reaparición pública en Pablo Nogués. Allí, a las 18, en la sede de la Municipalidad de Malvinas Argentinas, junto al intendente Jesús Cariglino firmará un convenio para pavimentación de calles y la atención estará puesta en su discurso.

De la agenda presidencial también se desprende una intensa actividad para mañana en Mar del Plata, que comenzará a las 16 recorriendo las obras de remodelación del Hotel Provincial, continuará visitando la empresa textil Ana, donde dará un discurso, y concluirá en el Polideportivo Municipal, con un acto en el que lanzará el Programa Jóvenes Padre Mugica, del Ministerio de Desarrollo Social, para asistir, en una primera etapa, a mil jóvenes de esa ciudad.