La incorporación del diputado Alfredo Olmedo al massismo en Salta generó críticas internas de dirigentes del Frente Renovador que aspiran a sumar justamente figuras con perfil “renovador” y “menos desgastado”. “La renovación no es con gente como Olmedo”, advirtió el diputado Adrián Pérez. “El criterio general es que habría que ser muy cuidadoso con las incorporaciones pero también hay que ser estricto en que no estamos en un club cerrado poniendo bolillas negras”, dijo el diputado Alberto Asseff, presidente de Unir, aliado al FR.

Pérez consideró que el massismo “tiene que ser cada vez más frente y más renovador y tratar de trabajar en esa línea”. “Hay que intentar convocar a dirigentes de otras fuerzas políticas, inclusive de nuevas generaciones, pero la construcción no es sólo con los nuevos”, señaló. Si bien admitió que “la renovación no es con gente como Olmedo”, dijo que “con la herramienta de las PASO la gente es la que terminará eligiendo”.

Asseff, por su parte, señaló que la incorporación de Olmedo instala en la ciudadanía “una duda respecto de la dimensión renovadora que debe tener el FR si los protagonistas sobrellevan una larga actuación y extenso desgaste”. “Lo ideal es que haya dirigentes renovadores”, dijo, y citó como ejemplo (a no seguir) el de José Manuel De la Sota, quien “perdió en Marcos Juárez en un territorio donde la alianza de él tenía el control del distrito”. Asseff reconoció que “las incorporaciones son decisiones últimas del jefe del espacio (Sergio Massa)”.

Otros dirigentes expresaron por lo bajo su preocupación ante determinadas incorporaciones, como la de Raúl Othacehé, que derivó en el distanciamiento de quien había encabezado la lista de concejales por Merlo, Gustavo Menéndez.