EL PAíS
Reducen las penas a los asesinos del fotógrafo José Luis Cabezas
El ex jefe de Seguridad de Alfredo Yabrán, Gregorio Ríos, podría salir en libertad en 2007. Los padres de Cabezas reaccionaron indignados y consideraron que los jueces “son tan mafiosos como ellos”.
Por Raúl Kollmann
Después de una insólita demora de tres años y nueve meses, la Sala I de la Cámara de Casación Penal bonaerense resolvió reducirles las penas a quienes fueron condenados como asesinos de José Luis Cabezas en el juicio oral. José Luis Auge, integrante de la banda de Los Hornos, es el que más rápido podría salir en libertad, ya que condenado a 20 años debe cumplir 13 años y cuatro meses de prisión para pedir la libertad condicional. Si se toma en cuenta la ley del dos por uno, Auge podría salir a fines de 2004. Gregorio Ríos, el jefe de seguridad de Alfredo Yabrán, con reducción de condena a 27 años, podría salir en 2007. El fiscal de Casación Carlos Altuve, y los abogados Jorge Sandro y Fernando Burlando, que representan a buena parte de los condenados, ya adelantaron que apelarán el fallo ante la Corte Suprema bonaerense. “Los jueces son tan mafiosos como ellos. ¿Cuándo se van a enterar que son los asesinos y que se tienen que pudrir en la cárcel?”, dijo José Cabezas, el padre de José Luis.
Todos los participantes de la operación del asesinato de Cabezas fueron condenados a prisión perpetua, salvo quien apareció como organizador de la banda, el policía bonaerense Gustavo Prellezo, que fue condenado a reclusión por tiempo indeterminado, la pena más alta del código. Curiosamente, hubo una controversia en los plazos y la forma de la apelación de Prellezo, y la Justicia consideró inválida su presentación, por lo que en su caso el fallo quedó firme.
Los demás condenados en el juicio oral fueron los cuatro integrantes de la banda de Los Hornos –el fallecido Miguel Retana, Gustavo González, Horacio Braga y José Luis Auge– y los policías Sergio Camaratta y Aníbal Luna. A los dos primeros horneros ahora les bajaron la pena de prisión perpetua a 20 años, en tanto que a Auge le dieron 18. A los policías les rebajaron también las penas y quedaron en 25 y 24 años respectivamente.
El cálculo para establecer cuándo podrían regresar a la calle es el siguiente:
- Fueron detenidos en 1997. Desde el ‘97 al ‘99 no se toma en cuenta la ley del dos por uno, ya que es el tiempo que se considera normal en la causa. O sea en esos dos años, suman dos años para la condena.
- A partir del ‘99 cada año se cuenta doble. Eso significa que son cuatro años y se computan ocho.
- Sumados los dos primeros, más los ocho del dos por uno, los condenados llevan para el cómputo más de diez años presos.
- Si a Auge lo condenaron a 18 años, al haber cumplido dos tercios de la pena puede pedir la libertad condicional. O sea a los 12 años.
- Como para el cálculo ya lleva más de diez y se sigue computando el dos por uno, en menos de un año podría volver a la calle.
- El mismo cálculo se puede hacer con los demás condenados.
La condena a prisión perpetua significa que el condenado debe pasar al menos 20 años en prisión. En el caso de Ríos, la pena reducida de 27 años, aplicado el dos por uno, y con la posibilidad de pedir la libertad condicional cumplidos los dos tercios de la pena, se transforma en algo menos de diez años de pena efectiva, lo que le daría chances de salir en septiembre de 2007.
“No hay justicia –bramó Norma Cabezas, la madre de José Luis–. ¿Para eso se tomaron cuatro años estos jueces? No pensé que eran tan falsos.” La hermana del fotógrafo, por su parte, calificó el fallo de “lamentable”. “Parece que a algunos no les quedó claro que estos sujetos asesinaron a José Luis Cabezas”, sentenció.