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Dos ex policías chaqueños fueron arrestados por su participación en la Masacre de Margarita Belén. Se trata del ex subcomisario Luis Chas y el ex comisario principal Carlos Carballo, quienes están acusados de haber acompañado el “convoy de la muerte” que llevó a 22 detenidos desde Resistencia hasta el paraje cercano a la Ruta 11 donde fueron asesinados. De esta forma, ahora son diez los represores detenidos en esta causa, que la semana pasada motivó la suspensión de dos camaristas federales por “favorecer la estrategia de la de la defensa”.
El juez federal de Resistencia Carlos Skidelsky ordenó el lunes la detención de cuatro represores, pero por el momento sólo se concretaron dos arrestos. Uno de los involucrados, Atilio Cabral, está muerto y Raúl Vargas está siendo buscado. De esta forma, son dos los ex policías que esperan ahora en la Unidad Especial de Bomberos del Chaco que el magistrado los cite a declarar. Con Chas y Carballo –imputados como autores directos–, son diez los represores presos por esta masacre.
“Es un nuevo avance en la causa, pero todavía falta mucho. Cuando todos los responsables estén juzgados vamos a considerar que ha llegado la justicia. Es un paso importante porque se han removido obstáculos institucionales para avanzar en la investigación y eso lo vemos como positivo”, aseguró a Página/12 Mario Bosch, abogado de la agrupación HIJOS del Chaco.
La masacre se llevó a cabo en la madrugada del 13 de diciembre de 1976, después de que los presos fueran torturados, sacados de la alcaidía policial y subidos a un camión militar que se dirigía supuestamente a Formosa. En un camino lateral a la ruta, los detenidos fueron ejecutados.
Los organismos de derechos humanos aún esperan que se haga efectiva una resolución reciente de la Cámara Federal de Resistencia que ordenó detener a otros ocho represores, en este caso, por haber torturado a once presos políticos antes del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. Pero uno de ellos ya no podrá ser arrestado: Carlos Alcides Thomas, ex jefe de la Brigada de Investigaciones de Resistencia, falleció ayer. En ese mismo fallo, los camaristas dispusieron que se investigara a los fiscales Carlos Flores Leyes y Roberto Mazzoni, quienes fueron señalados por ex detenidos por haber estado presentes en sesiones de torturas en los centros de detención del Chaco. Flores Leyes y Mazzoni también están siendo sometidos a una pesquisa interna en la Procuración General de la Nación que terminaría en un jury de enjuiciamiento.
La semana pasada, el Consejo de la Magistratura suspendió a los camaristas Tomás Inda y María Beatriz Fernández por haber ordenado la liberación a través de un procedimiento ilegal a diez represores acusados por la masacre de Margarita Belén. Esos imputados volvieron luego a ser arrestados, pero uno de ellos, Norberto Raúl Tosso, se escapó y actualmente está prófugo. Al dejar en libertad a los acusados, los jueces no habían fijado ningún tipo de caución.