El subsecretario de Investigaciones del Ministerio de Seguridad bonaerense, Enrique Gallesio, señaló ayer que está probado que Jorge Julio López se fue de su casa por sus propios medios, que realizó una caminata por el barrio como las que solía hacer y fue visto por tres testigos caminando solo en esa mañana. Gallesio, que es junto al fiscal Marcelo Martini el encargado de encontrar a López, dijo que se está investigando si algún grupo lo privó de la libertad, pero también que el profundo estrés psicológico que le produjo el juicio lo haya llevado a esconderse por temor. “Soy moderadamente optimista de que lo vamos a encontrar sano y salvo, aunque debo admitir que ya han pasado demasiados días”, redondeó el funcionario.

Uno de los elementos más desconcertantes del caso López es que no hubo ningún tipo de violencia en el momento en que abandonó su casa. En una entrevista con el programa El Exprimidor, Gallesio recordó que “no hay un solo testimonio de un ataque o algo que se le parezca. Todo lo contrario. En la causa declararon testigos que lo vieron caminando solo, como lo hacia casi todos los días, por las calles del barrio”.

–¿Existe algún antecedente de que López se haya ausentado de su casa por un tiempo?

–Mire –contestó Gallesio–, López es un hombre que no hablaba con su familia del drama que vivió durante el proceso militar. De manera que era un tema que tenía dentro suyo y el juicio le provocó un fuerte impacto, como lo ha dicho el fiscal. Pero sí es cierto que en otra oportunidad ya se había ausentado.

–¿Cómo es posible que, si tiene un extravío mental, no se lo haya podido encontrar a lo largo de once días?

–Ni nosotros ni la familia ni la fiscalía tenemos una respuesta definitiva para esa pregunta. Tenemos sí hipótesis que mantenemos en reserva para el bien de la investigación. Por supuesto que estamos haciendo una amplia investigación, un entrecruzamiento de más de 90.000 llamadas, para determinar si algún grupo no lo está privando de la libertad como forma de represalia o para intimidar a futuros testigos. Esa hipótesis también la estamos trabajando las 24 horas del día.

–¿Usted diría que el diagnóstico es pesimista u optimista?

–Yo soy moderadamente optimista de que vamos a encontrar a López con vida, sano y salvo. Es cierto que han transcurrido demasiados días, pero los elementos que existen en la causa judicial, los que tienen que ver con la investigación de los hechos, me llevan a tener ese optimismo cauteloso.