El candidato del Frente para la Victoria, Juan Manuel Urtubey, se impuso por menos de un punto en la elección para gobernador de Salta al postulante del romerismo, el actual vicegobernador Walter Wayar. El resultado fue 45,47 por ciento para Urtubey y 44,68 por ciento para Wayar, pero éste no reconoció su derrota y dijo que las 60 mesas que no se contaron en el escrutinio provisorio le darán el triunfo por medio punto en el escrutinio definitivo. Urtubey consideró esa postura “absurda” y lamentó que “sigamos perdiendo tiempo y que no empecemos a trabajar para llevar adelante la transición”. Ahora habrá que esperar hasta el martes que viene para conocer el final de la historia.

Las encuestas vaticinaban un final cerrado entre ambos candidatos. Elegido su delfín por el gobernador Juan Carlos Romero para continuar sus doce años de hegemonía, Wayar comenzó a mostrar sus falencias como candidato ya durante la campaña. Romero entonces jugó fuerte. Abandonó la idea de desdoblar los comicios y los juntó con los nacionales, de manera de hacer valer su candidatura a senador. Por la candidatura presidencial no había problemas, porque ya había obtenido el aval de la Casa Rosada para llevar a Cristina Fernández de Kirchner.

Urtubey, un diputado de 38 años que renunció a su banca para dedicarse a la campaña, fue de menor a mayor. Con el sello kirchnerista del Frente para la Victoria y el apoyo del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, comenzó a ganar apoyo en el interior provincial hasta que un mes antes de las elecciones apareció al frente en una encuesta del CEOP, una consultora que suele hacer trabajos para el gobierno nacional.

Así llegaron al domingo con una paridad que se vio reflejada en las urnas. Según la ciudad que era cargada en el escrutinio, pasaba al frente uno u otro candidato. El escrutinio provisorio se detuvo en la madrugada del lunes, cuando faltaban contabilizar apenas 60 mesas –que venían con sus telegramas demorados–, con el 0,8 por ciento a favor del candidato opositor, poco más de 4 mil votos. Urtubey festejó y se proclamó el nuevo gobernador salteño, pero el romerismo no reconoció el resultado. Ayer, Wayar dio una conferencia de prensa en la que aseguró que la proyección de las famosas 60 mesas “me aseguran el triunfo por medio punto de ventaja”.

Romero, que ganó la elección correspondiente al senador nacional, consideró “irresponsable” festejar un resultado provisorio y mostró restarle importancia al sorpresivo mal paso de su candidato. “Se ve que ninguno de los dos candidatos pudo convencer a la gente, más allá de la equivalencia de votos”, agregó.

Urtubey ayer no aceptó el argumento del romerismo. “En esas mesas que faltan escrutar no tendríamos que sacar un solo voto para que se dé de lo que dice Wayar, y eso es imposible”, respondió. También se mostró confiando en que el escrutinio definitivo va a darlo arriba con una mayor diferencia, porque en el provisorio se presentaron urnas en las cuales había votado el 100 por ciento del padrón y que todos los votos habían sido para Wayar.