Ayer al mediodía cerró el plazo en el Senado para presentar dictámenes sobre las retenciones móviles y la cifra de iniciativas trepó a cinco. La propuesta oficialista que ratifica la media sanción de Diputados sin ningún otro cambio; la del disidente Carlos Reutemann, que propone retenciones fijas con un tope del 40 por ciento cuando el precio internacional de la soja trepe a 800 dólares; la del radical K Pablo Verani, que ratifica la resolución 125 pero establece diferenciaciones y reintegros para productores de hasta 2000 toneladas exportadas. El abanico opositor que encabezan la UCR, la CC y el peronismo anti K plantea que los derechos de exportación se establezcan por ley del Congreso y propone una tabla progresiva y segmentada que en ningún caso supera el 35 por ciento. A la lista se sumó el dictamen del renovador salteño Juan Pérez Alsina, que propone por dos años volver a las retenciones del 35 por ciento. El socialista Rubén Giustiniani y Carlos Menem presentaron también sus propios proyectos, aunque ninguno de ellos tomó forma de dictamen.

Mientras toda la oposición busca frenéticamente conseguir las manos necesarias para rechazar la propuesta oficialista en el recinto, sus proyectos terminaron diversificándose. Finalmente –entre oficialistas y aliados díscolos y los partidos opositores– se presentaron cuatro dictámenes y dos proyectos alternativos a la media sanción que llega desde Diputados. Sin embargo, afirman que podrían acercar posiciones entre todos si consiguen doblegar al oficialismo en la votación.

El Senado tratará el dictamen de la mayoría impuesto por el kirchnerismo. Aunque ya empezaron a analizarse “técnica y reglamentariamente” qué requisitos deberá sortear la oposición para tratar sus propios dictámenes si el del oficialismo fracasa. Ahí también, los caminos e interpretaciones se bifurcan. Desde la secretaría parlamentaria del Senado afirman que si el dictamen oficialista es rechazado el proyecto “se cae” y no podría ser vuelto a tratar durante el presente período parlamentario. Lo que dejaría vigente las resolución 125 del Ministerio de Economía sin los cambios introducidos en Diputados.

En la propia secretaría parlamentaria hacen otra lectura. La Cámara alta podría abrir el debate sobre los otros dictámenes en el propio recinto, “de acuerdo a la fecha y hora de sus presentaciones”, o que los mismos puedan ser pasados a discusión en las comisiones parlamentarias. Aunque esa discusión quedará relegada hasta cuando se resuelva la votación en la sesión de mañana.

Los lineamientos de los distintos dictámenes son los siguientes:

- Oficialismo. Convalida la movilidad de las retenciones para las exportaciones de granos y oleaginosas establecidas en la resolución 125 y las modificaciones. Establece reintegros para pequeños y medianos productores que dejarían, en el caso de la soja, las retenciones en el 35 por ciento, para las primeras 750 toneladas de los productores que exportan hasta 1500 toneladas. Mientras que los que estén por debajo de las 300 toneladas pagarán retenciones del 30 por ciento. También redujo al “mínimo” las exigencias impositivas para el cobro de reintegros, que se devolverían en 30 días hábiles a partir de la aprobación de la AFIP y a través de la Clave Bancaria Uniforme (CBU).

- Carlos Reutemann. Propone para la soja una curva de retenciones con alícuotas crecientes a medida que aumenta el precio internacional con un tope del 40 por ciento cuando cotice a 800 dólares. Plantea que los pequeños y medianos productores de soja (hasta 1500 toneladas) podrán computar a cuenta del pago del impuesto a las Ganancias el excedente sobre alícuotas del 22, 27 y 30 por ciento, dependiendo del volumen de producción. Para el trigo y el maíz establece una retención fija del 22 por ciento y para el girasol del 30 por ciento. Promociona el uso de fertilizantes con la deducción adicional de hasta el 70 por ciento de los gastos como desgravación del impuesto a las Ganancias. Reduce el IVA de las semillas, herbicidas, insecticidas, funguicidas e inoculantes al 10,5 por ciento. Restituye al Congreso las facultades para establecer derechos de exportación al derogar el artículo 755 del Código Aduanero

- Pablo Verani. Ratifica la resolución 125, pero fija una escala de retenciones diferenciadas para los productores de hasta dos mil toneladas y con alícuotas del 33 por ciento para la soja y de 32 por ciento para el girasol. También establece topes para las retenciones al maíz (28) y el trigo (28). Además, elimina el sistema de compensaciones y coparticipa las retenciones con los gobiernos provinciales.

- UCR, CC y peronismo anti K. Establece que los derechos de exportación se deben realizar por ley. Las retenciones a las exportaciones no podrán superar el 35 por ciento porque lo consideran “confiscatorias”. Después establece un piso, una tabla progresiva según el tonelaje de exportación y un techo para cada uno de los granos y oleaginosas. En el caso de la soja, el piso es del 20 por ciento y las primeras 300 no pagan ningún adicional, hasta 600 toneladas se agrega un 2 por ciento; hasta 1500 el adicional es del 4 por ciento; hasta 3000 el 6; hasta 4500 el 10; y para más de 4500 toneladas el 15 por ciento. Para el trigo el piso es del 15 por ciento con un techo del 6 por ciento para el adicional en los casos que supere las 3600 toneladas. Para el maíz el piso es del 15 por ciento con un techo de adicional del 10 por ciento para más de 4000 toneladas exportadas. Para el girasol, el piso es del 20 por ciento y el techo adicional no podrá superar el 10 por ciento a quienes superen las 4000 toneladas.

- Juan Pérez Alsina. Establece que por dos años los derechos de exportación volverán a los valores anteriores a la resolución 125.