Más allá de compartir o no las opiniones y miradas “políticas” del rabino Sergio Bergman, creo que es importante separar la paja del trigo. Bergman en su calidad de rabino no representa ni remotamente a “toda” la comunidad judía de la Argentina, sino a una pequeña porción de ella. Su pensamiento no expresa para nada lo que piensa la mayoría de esta comunidad. Por eso es importante borrar del imaginario de la sociedad argentina que su voz, por ser rabino, es representativa de toda la comunidad judía.

Dado el silencio de las entidades representativas de la comunidad judía frente a los dichos expresados por Bergman días pasados en la Plaza de Mayo, creí necesario manifestar mi pensamiento, ya que al igual que yo, hay miles de argentinos judíos que no se sienten identificados y contenidos con los dichos del mencionado rabino.

* Ex vicepresidente de AMIA 2005-2008.