Empleados nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) realizaron ayer, en La Plata, una “jornada provincial de protesta”, que incluyó el bloqueo del acceso a la autopista hacia Buenos Aires y una marcha a la Legislatura bonaerense, en rechazo a los despidos estatales y a la suspensión por decreto de ley que disponía el inicio de las negociaciones paritarias municipales, medida que la gobernadora María Eugenia Vidal se dispuso a revisar ayer. “Es un mamarracho jurídico que a través de un decreto de necesidad y urgencia se suspenda la ley, porque la provincia de Buenos Aires no tiene esa potestad”, cuestionó el secretario general de ATE Provincia, Oscar De Isasi.

Isasi aseguró que la decisión que adoptó la gobernadora el pasado 5 de enero es “un disparate”, ya que la provincia de Buenos Aires “no tiene la potestad de suspender una ley a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia”. “Lo que se quiere hacer es poner en la congeladora la paritaria municipal, no se quiere que entre en vigencia. No es casualidad que el decreto de la gobernadora salga el día 5, cuando el 6 se ponía en marcha la paritaria”, afirmó el sindicalista.

A través del decreto 26, firmado por Vidal, la provincia suspendió la aplicación de la Ley 14.656, votada el año pasado por la Legislatura bonaerense, que disponía el inicio de las negociaciones paritarias en los municipios, y que entraba en vigencia el 6 de enero. La norma establece además que en un plazo de hasta cinco años al menos el 80 por ciento de los municipales de comunas bonaerenses deben tener garantizada la estabilidad laboral, cuando la media actual es de un 50 por ciento de precarizados, y establece que los sueldos comunales no pueden ser inferiores al salario mínimo, vital y móvil.

“La gobernadora no sé quién se cree que es, no se puede cambiar las leyes por decreto, y mucho menos reinstalar otra ley que ya había sido declarada inconstitucional”, consideró el secretario general de ATE Nacional, Hugo “Cachorro” Godoy. “Los trabajadores no vamos a permitir esto, y le respondemos a la gobernadora Vidal, pero también al presidente Macri que de manera indirecta está diciendo que no le importa la democracia ni el Estado”, agregó el sindicalista.

Por otro lado, desde ATE se manifestaron contra los despidos estatales que, según estimaron, suman alrededor de 8 mil en la provincia, incluyendo más de 4600 en la ciudad capital. “Pedimos a los intendentes que cesen los despidos, que reincorporen a los compañeros y que nos pasen a planta permanente”, solicitó Isasi. Sobre el argumento de que los trabajadores despedidos no cumplían funciones, el dirigente reflexionó: “Es una mentira porque, si hay ñoquis, con un control de asistencia de 15 días se verifica y se resuelve. Eso es una excusa para justificar este tipo de medidas”.