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–Hablemos de las coimas en el Senado. Usted fue senador y posiblemente vuelva a serlo en 2005...
–No creo.
–El peronismo bonaerense acaba de sacar un documento, aplaudiendo a Antonio Cafiero. ¿Cafiero le contó algo más de lo que dijo públicamente?
–En aquella oportunidad, Cafiero vino a almorzar con nosotros porque tenía esa información pero no tenía pruebas y me vino a decir que estaba dispuesto de todas maneras, sin pruebas, a pedir la investigación. Entonces hicimos la reunión en La Plata, en el Consejo de Provincia, y le dimos todo el apoyo a él y al por entonces senador Villaverde para que aún sin pruebas plantearan el tema, porque era muy grave. Ahora ¿qué pasa, por qué las cosas cambian? Las cosas cambian cuando hay ejemplaridad desde más arriba y hoy la hay. Se termina, empieza todo a ordenarse y hoy, con Kirchner, hay ejemplaridad, que es lo que yo venía reclamando desde 1984, con proyectos de ley y con la conformación de la Comisión de
Recuperación Etica a los cuatro meses de asumir como vicepresidente. Yo estaba convencido de que, así como el pescado se pudre por la cabeza, el Estado se recompone a partir de la ejemplaridad de quien gobierna. Por eso, digo, estamos frente a un liderazgo ético que es lo que Argentina necesita. Entonces se va a ir acomodando todo.