Cuando todas las miradas se posaban en su nuca, el represor Luis Abelardo Patti afirmó sobre las sospechas que pesan sobre él: “Me parece que en un hecho como éste hay que tener más seriedad; es como si yo le echara la culpa al Gobierno. No podemos andar con pavadas y estupideces de estas características”. Luis Gerez había denunciado a Patti como partícipe de las torturas que sufrió en 1972 en una comisaría de Escobar. El ex subcomisario insistió en que no recuerda si participó de la detención del albañil. “Es un hecho que ocurrió hace 34 años”, se justificó. “No sé si lo detuve o no, no lo recuerdo: si lo veo, no sé quién es”, dijo Patti. “Tengo la esperanza de que esto termine bien, pero si termina mal, y tiene alguna relación con el caso López, es un tema que va mucho más allá de Escobar y de Patti. Ya es institucional”, afirmó. “Si hay capacidad de operar en La Plata (donde desapareció Julio López) y en la otra punta, y los dos hechos tienen la misma finalidad, hay un tema político de desestabilización y hay una apoyatura económica”, dijo.