Movimientos piqueteros, agrupaciones políticas de izquierda y sindicales, se movilizaron durante el transcurso del día en repudio a la gira del presidente de Estados Unidos, George Bush, por América latina. Fueron tres citas en diferentes puntos de la ciudad. Hubo incidentes con la policía en las inmediaciones de la sede de la Cámara de Comercio estadounidense.

Pasado el mediodía, una columna de piqueteros, con las clásicas capuchas y pasamontañas cubriendo sus cabezas y organizados con palos, se concentraron frente a la Embajada de Uruguay, ubicada sobre la avenida Las Heras, en el barrio de Recoleta. Luego marcharon hacia el centro, hasta la casa comercial estadounidense en Viamonte y Cerrito, donde, alrededor de las cinco de la tarde, manifestantes de la organización de izquierda Quebracho comenzaron a quemar banderas del país del Norte y a lanzar piedras contra los policías que custodiaban el edificio. También prendieron fuego fotos de Bush vistiendo simbología nazi, por lo que el cuerpo de bomberos de la Policía Federal tuvo que intervenir para apagar algunos pequeños focos de incendio.

Dos horas más tarde, a las siete, encolumnados detrás de una gran bandera que decía “Fuera yanquis de América latina”, la protesta más numerosa fue la que convocaron los partidos de izquierda, que se dirigió a la Embajada de los Estados Unidos, donde los recibió un fuerte operativo de seguridad policial. El Partido Comunista (PC), el Movimiento al Socialismo (MAS), el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) y el Partido Obrero (PO) junto con su rama piquetera, el Polo Obrero, fueron algunos de los que participaron del acto.

En forma pacífica y con el resguardo de manifestantes con palos que cortaban y desviaban el tránsito de las avenidas y calles, las columnas avanzaron hasta el frente del Zoológico porteño, en el barrio de Palermo, con la ex diputada Patricia Walsh, el dirigente piquetero Néstor Pitrola, el líder del PO y ex legislador de la ciudad Jorge Altamira y algunos sindicalistas a la cabeza.

Al finalizar, casi todos los que participaron en el intenso maratón de protesta enfilaron para el acto central “anti-Bush”, que tenía como principal orador al presidente venezolano, Hugo Chávez, en la cancha del club Ferro Carril Oeste, en el barrio de Caballito.