Mauricio Macri se reunirá mañana con Jorge Telerman para empezar a acordar el traspaso de la administración porteña y le hará dos pedidos concretos: que le entregue la ciudad con “las cuentas equilibradas” y que le facilite a su gente empezar a conocer en profundidad las distintas áreas de gobierno. El actual mandatario local le reiterará su disposición de consensuar el Presupuesto 2008, así como también de discutir las obras y licitaciones con proyección a futuro y eventualmente la modificación de la estructura ministerial. Será el comienzo de un proceso que debe concluir con la entrega del mando el próximo 10 de diciembre, pero que no tendrá a Macri y Telerman como únicos protagonistas: “Seremos los fiscales de la transición”, adelantan los kirchneristas.

Telerman invitó a Macri a reunirse para comenzar la transición cuando lo llamó para felicitarlo por su triunfo el domingo pasado. Los detalles del encuentro –del que volvieron a hablar el lunes a la noche en un cruce en un estudio de televisión– los arregló el futuro jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, con el propio Telerman.

La reunión será mañana a las cuatro de la tarde en la Jefatura de Gobierno. En el macrismo adelantaron que Macri concurrirá junto a Rodríguez Larreta y la vicejefa electa, Gabriela Michetti. “Es posible que también vaya (Néstor) Grindetti, que es el encargado de los números, y tal vez a Mauricio también le interese que esté (el vicepresidente primero de la Legislatura), Santiago de Estrada, para coordinar la agenda legislativa”, especuló un dirigente macrista de primera línea. Telerman recibirá a Macri con los colaboradores que coordinarán en su nombre la transición, aunque sus allegados no descartan que en el tramo inicial de la reunión hable a solas con su sucesor.

“El encuentro será a agenda abierta y la idea no es entrar en detalles, sino definir los ejes políticos relacionados con los temas de gestión. Tenemos el documento en el que proponemos darle un marco institucional a la transición”, explicó el secretario de Prensa y Difusión porteño, Oscar Feito, quien estimó que la reunión “va a servir para aclarar los números reales en cuanto al déficit, que no es tan grave como se presenta” e insistió en que “nosotros no tenemos ñoquis y no pensamos en despidos ni nada por el estilo”.

Los macristas tienen otra opinión y la van a exponer en la mesa de discusión, más allá de consensuar quiénes son los coordinadores de la transición. “Hay grandes bolsones de contratos políticos, de gente que no labura. Reducirlos hace al equilibrio de las cuentas”, dijo a Página/12 un macrista y habló también de “la oportunidad de hacer una presentación conjunta de esos problemas de cara a la sociedad porque no ha sido Telerman el que más gente ha nombrado y nosotros tenemos la legitimidad que nos da el 60 por ciento de los votos”. El propósito es el que explicitó otro colaborador de Macri: “Queremos que Telerman nos entregue la ciudad ordenada para no perder cinco meses de gestión”.

“No nos parece bien que Telerman haga el trabajo sucio por Macri. Si el jefe de Gobierno electo piensa en veinte mil despidos y en endeudar la ciudad, que asuma y lo haga”, advirtió el jefe del bloque K en la Legislatura, Diego Kravetz. Los kirchneristas sospechan de un “pacto” entre Macri y Telerman, cuya continuidad hasta el 10 de diciembre ponen en duda, y prometen ser los “fiscales de la transición”.