Las obras que realiza la empresa AUSA en el Parque Chacabuco, para ampliar la Autopista 25 de Mayo, ocasionan cada vez más trastornos a los vecinos. Ahora, después de la lluvia del jueves, la tierra acumulada en el obrador tapó las cloacas y desagües del polideportivo que funciona en el parque, que está cerrado desde ese día porque sus instalaciones se inundaron. Así lo confirmó a Página/12 el subsecretario de Deportes de la ciudad, Francisco Irarrazával. Incluso, corren serio riesgo los costosos equipos del complejo, que es utilizado en forma gratuita por unas diez mil personas, en su mayoría niños. Como consecuencia del taponamiento de cañerías, se produjeron filtraciones en dos escuelas ubicadas sobre el parque: una primaria y un profesorado de Educación Física.

El administrador del Polideportivo, Alejandro Cravedi, explicó a este diario que la obra que realiza AUSA –una subida y una bajada que conectan con la autopista– “viene produciendo trastornos al polideportivo, porque taparon la ventilación e hicieron perforaciones por donde ahora entró el agua y el barro”.

La obra comenzó a mediados del año pasado, pero cobró impulso en noviembre. A partir de ese momento comenzaron las protestas de los vecinos, que se oponen a la obra porque, dicen, le resta al parque una importante franja de espacio verde e incrementará el flujo de vehículos en una zona donde funcionan cinco escuelas. La subida y la bajada se construyen sobre la calle Curapaligüe y pasan a escasa distancia de dos jardines de infantes y una pista de atletismo.

“Después de la lluvia del jueves, el agua arrastró las montañas de tierra, tapó los desagües con barro y se inundaron todas las instalaciones, desde la sala de máquinas hasta las canchas de fútbol”, afirmó Cravedi. En el lugar funciona una pileta climatizada, que también resultó afectada, ya que “el agua tapó la caldera y las bombas”. El funcionario se quejó por la “falta de previsión por parte de AUSA y de la empresa contratista de la obra”.

Consultada por este diario, AUSA –una sociedad del Estado porteño encargada de gestionar la red de autopistas– se limitó a responder a través de un vocero que “la empresa no está implicada en la obstrucción de las cañerías, ya que es un problema del polideportivo y no está vinculado con las obras”. “Ya se envió personal para que destape las cloacas”, agregó.

–Si el problema no fue generado por AUSA, ¿por qué lo destapan ustedes? –preguntó este diario.

–Para colaborar con la gente del parque –respondió el vocero.

Los vecinos que se oponen a la obra también cuestionaron la falta de previsión de AUSA. “Si no toman recaudos para hacer la obra y evitar daños, no queremos imaginar lo que puede ocurrir cuando la subida y la bajada estén terminadas”, se alarmó Adrián Placenti, usuario del parque.

Los vecinos ya se reunieron con representantes del Ministerio de Desarrollo Urbano, quienes confirmaron la continuación de la obra, aunque suspendieron la construcción de la subida, para realizar nuevos estudios. El caso también es tratado en la Legislatura, a partir de un proyecto del diputado Sergio Abrevaya (Coalición Cívica), quien propone que se suspenda la obra hasta tanto se haga una audiencia pública. El proyecto iba a ser tratado en la última sesión de extraordinarias, el jueves pasado, pero el macrismo no dio quórum. En tanto, para este domingo, a las 17, los vecinos realizarán una radio abierta en el parque, para expresar su oposición a la obra.

El polideportivo de Parque Chacabuco es utilizado por vecinos y por alumnos de escuelas del barrio. Está ubicado bajo la Autopista 25 de Mayo y tiene canchas de fútbol, básquet, gimnasios y la pileta cubierta.

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