SOCIEDAD › DATOS EN EL DIA MUNDIAL DE LUCHA CONTRA EL SIDA
Las cifras porteñas, en baja
En todo el mundo se conmemora hoy el Día contra el Sida. En Buenos Aires, los testeos en embarazadas muestran un descenso del 40 por ciento en cuatro años en la incidencia del VIH-sida.
Por Pedro Lipcovich
Hay fuertes indicios de que la incidencia del VIH-sida disminuyó entre la población de la Ciudad de Buenos Aires. El indicador más aproximado en este orden es el testeo de las embarazadas en hospitales públicos, según el cual la presencia del virus cayó un 40 por ciento en los últimos cuatro años. Además, la mortalidad por sida bajó un 17 por ciento en el mismo lapso y la cantidad de casos nuevos de sida bajó un 30 por ciento, pero estos hechos no prueban que haya menos infecciones nuevas, sino que los medicamentos antivirales son eficaces, y se vinculan a su vez con otro dato favorable: seis de cada diez personas de 25 a 35 años se hicieron el test de VIH; de los casos que dieron positivo, el 70 por ciento tuvo el diagnóstico antes de registrar los primeros síntomas. Sin embargo, la ciudad sigue partida en dos: en la zona sur, la cantidad de casos duplica a los de la zona norte.
“Para una parte de la población –señaló Claudio Bloch, titular de Coordinación Sida de la Ciudad de Buenos Aires–, estamos controlando la epidemia” y agregó otro indicador: “La baja en la transmisión vertical”, de madre a hijo. Según Marcelo Vila, responsable de Vigilancia Epidemiológica de la Coordinación, “en los servicios públicos porteños la tasa de infección bajó al 2,7 por ciento entre los bebés cuyas madres tienen el virus; los mejores niveles mundiales están entre el 1,5 y el 2 por ciento, y llegaba al 20 por ciento antes de 2000”. Sin detección ni tratamiento, la transmisión llegaría al 40 por ciento.
La evolución de las cifras de VIH detectadas en las mujeres embarazadas son el indicador más aproximado de que se dispone para estimar lo que sucede entre la población general. En la Ciudad, el 1,29 por ciento de las embarazadas atendidas en establecimientos públicos testeó positivo en 2000; en 2001 bajó al 1,03; 0,9 en 2002 y 0,83 en 2003, hasta caer a 0,69 en 2004.
Bloch destacó “la incorporación al trabajo preventivo de diversas organizaciones comunitarias: comedores comunitarios, clubes y centros barriales”, y valoró “el criterio de integrar la asistencia con la prevención: una persona atendida en un centro de salud tiene que recibir, no sólo medicación, sino también preservativos”.
La tasa de nuevos diagnósticos de infección por VIH, que se establece desde hace un par de años (antes, sólo se detectaba el sida declarado), delata las diferencias geográficas: en 2003/2004, el diagnóstico de VIH al sur de la avenida Rivadavia fue de 15 casos nuevos por cada cien mil habitantes; al norte, 8 por cien mil. Silvana Weller, a cargo del área de prevención en Coordinación Sida, recordó que “el VIH se aloja sobre todo en los más pobres, que padecen otras urgencias inmediatas”, y observó que “el acceso está mediado también por factores culturales y se facilita a través de líderes comunitarios con quienes la gente pueda identificarse”.
El 55,9 de los diagnosticados con VIH se contagió por vía heterosexual; el 33,3 por ciento por relación entre hombres y el 5,2 por ciento por compartir jeringas al usar drogas. Se estima que en la Ciudad hay 31.000 personas con VIH y que la mitad de ellas lo desconocen.
El 60 por ciento de los porteños de 25 a 35 años se hicieron el test de VIH por lo menos una vez (la Ciudad tiene 15 centros gratuitos de diagnóstico: 0800-333-56836). Casi el 70 por ciento de los positivos pudieron diagnosticarse antes de los primeros síntomas, es decir, a tiempo.