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Más de cien personas murieron ayer al estrellarse un avión DC-9 de pasajeros en las cercanías de la ciudad de Port Harcourt, en el Sur de Nigeria, mientras que al menos siete pasajeros sobrevivieron a la tragedia. El avión, con 110 personas a bordo, había partido de la capital nigeriana, Abuja. Según fuentes de Sosoliso Airlines, propietaria de la nave, se incendió tras salirse de la pista durante el aterrizaje, debido a las malas condiciones climáticas. La agencia DPA, que cita fuentes no oficiales, aseguró que a bordo del avión viajaban numerosos estudiantes que habían iniciado sus vacaciones por las festividades de Navidad. Este es el segundo accidente aéreo grave en esta semana. El martes pasado una nave se estrelló en un complejo residencial en Teherán y causó la muerte de un centenar de personas. La compañía Sosoliso, que cubre seis rutas en Nigeria, fue fundada en 1994 y en 2004 ganó el premio a la mejor empresa de aviación nacional. En octubre pasado, en ese país africano murieron 177 personas cuando se estrelló el Boeing 737, poco después de despegar.