La Justicia investiga la denuncia de un consumidor que halló un elemento extraño dentro de una botella de vidrio de gaseosa, que aparenta ser un preservativo. Fuentes judiciales dijeron que el envase de la gaseosa está herméticamente cerrado, con lo cual los investigadores descartan que el elemento haya sido introducido tras el embotellamiento del líquido. El denunciante, Samuel Ravinsky, dijo que compró la gaseosa “de manera unitaria” y que “quedó sorprendido, pero más que eso disgustado” cuando llegó a su casa y observó en la parte superior ese elemento extraño. “A Defensa del Consumidor, donde hice la primera denuncia, fue un directivo (de la distribuidora local de la gaseosa) y me ofreció un resarcimiento”, reveló Ravinsky, pero aclaró: “No quiero dinero, quiero un responsable, porque de haber ingerido esa bebida qué se yo el daño que me habría producido”.