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- Para los hijos más pequeños, de hasta 4 años, elegir discos compactos con juegos por encima de la navegación. Hay que iniciarlos en el funcionamiento de la máquina, la pantalla, el teclado, el prendido, la inserción del disco y apagado.

- Para los hijos de 4 a 9 años, se pueden sentar a navegar juntos en Internet y descubrirla para simultáneamente enseñarles la seguridad en estos nuevos espacios. No es conveniente dejarlos navegando solos a menos que se tenga la seguridad de que ya saben controlar su caudal exploratorio por sitios que no sean adecuados para su edad.

- De 9 a 11 años, los pueden convertir en expertos y expertas en búsqueda de enciclopedias on line. Pueden enseñarles a escapar del guardado de propagandas y aprovechar para analizarlas juntos. Los padres pueden estimular a sus hijos a que al final del día les cuenten sobre lo que hicieron cuando navegaron. Hay que dejarlos que cuenten qué les gustó y qué no. Es un momento clave: si se los reta, es probable que no cuenten más a sus padres.

- De 12 a 14 años. Hay que darles mayor independencia, para que chateen con sus mejores amigas y amigos y tratar de que entren poco en los chats públicos. Es aconsejable probar jugar con los hijos para analizar juntos los juegos.

- De 15 en adelante. Los hijos estarán cosechando lo que sembraron los padres en las etapas anteriores. Hay que seguir dialogando, pero reconociendo que ya deben saber cómo usar su libertad.

Fuente: “Internet: ventajas y riesgos”. Cecodap.