La decisión judicial que permitió que Alex Freyre y José María se casen tuvo ayer dos detractores: un abogado, que pidió la nulidad de la futura boda por considerar que la sentencia judicial que le hizo lugar está “viciada de incompetencia”, y el Arzobispado de Buenos Aires, donde rechazaron el fallo considerando que es “absolutamente ilegal”. El texto del Arzobispado, firmado por el cardenal Jorge Bergoglio y los seis obispos auxiliares porteños, incluye una crítica al gobierno de Mauricio Macri por no apelar la medida: “Es una decisión política que sorprende”.

El pedido de nulidad, radicado en el Juzgado Civil Nº 92, a cargo de María Rosa Bosio, fue hecho por el letrado Pedro Andereggen, quien considera que la jueza que avaló el casamiento, Gabriela Seijas, es incompetente. “Se ha fallado contra la esencia de un instituto de derecho natural como es el matrimonio”, dijo.

Para el Arzobispado porteño, la sentencia “constituye un signo de grave ligereza y sienta un serio antecedente legislativo para nuestro país y para toda Latinoamérica”. El comunicado también menciona la supuesta “crisis de valores que afecta hoy a nuestra sociedad” y asegura que el fallo es contrario “a distintos tratados internacionales con jerarquía constitucional desde 1994”.