Detrás de las vallas que cerraban el tránsito por toda la zona aledaña al edificio derrumbado, los vecinos eran una sola queja. “La situación es un desastre porque, en mi caso, perdí todo, desde mis papeles de trabajo hasta los documentos y el dinero que tenía, además de mi casa”, le dijo a la prensa Verónica, una abogada propietaria de un departamento del edificio de Bartolomé Mitre 1232. “Nos quedamos de golpe con lo puesto y no tenemos dónde ir, ni plata para movernos”, sostuvo, luego de lamentarse porque “nadie nos dice nada, no sabemos dónde ir, a quién reclamarle que nos atienda”. Lo mismo dijo Rosalía Vodanovich, dueña de un estudio jurídico y taller de orfebrería: “Las autoridades vienen, pero no se acercan a nosotros, que acabamos de perderlo todo”.

Cerca de los dos propietarios, cuatro turistas brasileños y otros tres de nacionalidad alemana expresaron su problema común, en algunos casos a través de un intérprete espontáneo: “Estábamos en un hotel y un hostel que están en la manzana del edificio. No podemos entrar a buscar nuestras valijas, nuestro dinero, toda nuestra ropa y hasta los pasajes para volver a nuestros países”. Los brasileños (tres hombres y una mujer) tendrían que haber partido de regreso a Río de Janeiro ayer por la tarde.

“Nadie nos atiende. Nos evacuaron anoche (por el viernes) del hostel en el que estamos viviendo desde hace un tiempo. No nos dieron ningún otro alojamiento y lo que nos ofrecen es lo mismo que le ofrecen a los indigentes que no tienen dónde vivir y duermen en la calle. Creo que es justo que nos den otro trato, que nos paguen un alojamiento similar al que estábamos ocupando”, recalcó Analía Valenzuela, acompañada por su esposo. Las quejas fueron minimizadas por la titular de Atención Inmediata de Desarrollo Social porteño, Guadalupe Tagliaferri, quien sostuvo que le dan asistencia “a cincuenta personas que fueron evacuadas”.