16:20 › BRASIL

Nubes grises que traen pánico

Una lluvia fina pero constante volvió a asustar hoy a la población de la región serrana de Río de Janeiro, y aumentó los temores de que se agrave la peor catástrofe climática de la historia del país, que dejó hasta ahora 520 muertos. Un nuevo temporal no sólo hace temer más desastres, sino que también amenaza con perjudicar los ya difíciles trabajos de búsqueda de víctimas, que ingresaron en su tercer día.

La situación en las áreas afectadas fue agravada hoy además por rumores que sembraron pánico, como el ocurrido en Friburgo, donde miles de personas vivieron momentos de terror al circular una falsa noticia sobre la ruptura de una presa de la ciudad, donde la tormenta dejó hasta ahora 232 víctimas fatales confirmadas.

El pánico se mantuvo hasta que la Municipalidad desmintiera la información: "Con todos los problemas que tenemos, fue lamentable enfrentar un rumor como este, porque mucha gente se sintió mal, tuvimos que atenderlas en el hospital de campaña, y no necesitamos eso en este momento, cuando tenemos que llegar a áreas aisladas para llevar agua y alimentos", lamentó el vicegobernador de Río, Luiz Fernando Pezao.

En la ciudad de Teresópolis, casi todos los comercios cerraron las puertas esta mañana, ante la noticia sobre asaltos masivos en la zona céntrica de la ciudad. La Municipalidad no confirmó que hubieran tenido lugar asaltos colectivos, pero admitió que se produjeron dos casos de saqueo, que llevaron a un refuerzo de la vigilancia policial en la ciudad.

Los rumores perjudican aún más a los ya difíciles trabajos de búsqueda de más víctimas de las lluvias, especialmente en Teresópolis, donde los rescatistas todavía no lograron llegar a tres de los barrios más gravemente afectados por la tormenta, entre ellos Campo Grande, una comunidad pobre donde, según se calcula, vivían unas mil personas, y que quedó prácticamente destruida.

"La impresión que tiene uno es la de que una cascada gigante y seca ocupó el lugar. Lo que se comenta es que un 80 por ciento de las más de mil personas que vivían allí se quedaron soterradas bajo esas piedras gigantes, del tamaño de autos", dijo una integrante del grupo de voluntarios dedicados a ayudar a los supervivientes de la tragedia, quien logró ver desde lejos a la comunidad.

El jefe de Defensa Civil de Teresópolis, el coronel Flavio Castro, estimó hoy que el número de víctimas fatales superará en mucho a las 228 registradas hasta ahora en la ciudad. En una rueda de prensa, el militar dijo hoy que las autoridades municipales tienen en manos una lista de 25 personas dadas como desaparecidas, pero se considera que hay todavía más muertos por ubicar.

Además de Teresópolis y Nova Friburgo, las lluvias dejaron víctimas fatales en Petrópolis (39), Sumidouro (19) y Sao José do Vale do Río Preto, donde fueron ubicados este viernes los cuerpos de dos personas que perdieron la vida en la tormenta.

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En Teresópolis, los rescatistas aún no llegaron a tres de los barrios más afectados, entre ellos Campo Grande, una comunidad pobre donde vivían unas mil personas.
 
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