La presidenta fue dada de alta ayer y se repone en la Residencia de Olivos de la intervención quirúrgica a la que fue sometida el miércoles pasado, cuando se le extrajo la glándula tiroides en el Hospital Austral de Pilar.

El parte médico leído ayer por el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, indicó que "el estudio histopatológico definitivo constató la presencia de nódulos en ambos lóbulos de la glándula tiroides pero descartó la presencia de células cancerígenas modificando el diagnóstico inicial de la punción".

Una semana antes de ser operada, y un día después de que se informara que tenía un carcinoma papilar, Cristina había bromeado, en un discurso en el Salón de las Mujeres, sobre la reunión –con la que amenaza Hugo Chávez desde que le diagnosticaron cáncer– entre líderes sudamericanos que pasaron por una experiencia con esa enfermedad: los brasileños Lula y Dilma Rousseff, el paraguayo Fernando Lugo, y el mismo Chávez.