El dirigente Enrique Salinas, al término de un prolongado encuentro en el Ministerio de Trabajo, confirmó el acuerdo y aclaró que "el aumento salarial del 23 por ciento contempla que todos los trabajadores tendrán asegurado un salario de 4000 pesos mensuales", y que el ministro Carlos Tomada había exhortado a los representantes del sector empresario a no descontar la jornada de paro cumplida la semana pasada.

Las negociaciones comenzaron el 15 de marzo con un reclamo de un 25 por ciento de aumento salarial y 300 pesos no remunerativos, a los que los empresarios contraofertaron un 15 por ciento, en tres cuotas. Con el transcurrir de varias reuniones en las sedes de la UOM, de distintas empresas del sector y de la cartera laboral, los empresarios se plantaron en un 20 por ciento de incremento, a pagar en dos cuotas: abril y agosto, pero no ofrecieron ninguna suma no remunerativa. El 10 de abril, la UOM que conduce el candidato a secretario general de la CGT, Antonio Caló, ante la negativa empresaria de acceder al reclamo original, convocó a un primer paro de 24 horas, que luego de la intervención de Trabajo se suspendió, pero que finalmente se concretó la semana pasada.

Tras diversas marchas y contramarchas en las negociaciones, ayer y luego de casi 5 horas de deliberaciones, comenzó a vislumbrarse la posibilidad de un acuerdo, se pasó a un cuarto intermedio hasta hoy, jornada en la que se firmó el acuerdo final.