A través de una carta, el gobernador Scioli le solicitó a Mauricio Macri una reunión el próximo jueves y le recordó que en la ley de Basura Cero, firmada entre ambos mandatarios en 2005, la Ciudad de Buenos Aires "se comprometió a reducir progresivamente la disposición final de residuos sólidos urbanos, previo tratamiento, en un 50 por ciento para el presente año, respecto de lo enviado a esta Provincia a través del CEAMSE en 2004".

Mariotto consideró que este acuerdo debe cumplirse porque, entre algunas razones, la provincia "la provincia de Buenos Aires no es un vaciadero para que la Capital Federal traiga todos sus desechos", e indicó que "hasta la Constitución establece que no puede haber basura de otros distritos en nuestro territorio y por eso apoyamos la decisión tan firme del gobernador".

Explicó, además, que esta posición "coincide con la que mantuvo la presidenta Cristina Fernández tiempo atrás cuando le reclamó al jefe de Gobierno porteño que acatara la Ley de Basura Cero y pidió la colaboración de los intendentes y del propio Scioli para efectivizar la normativa".